En 15 días se detuvo a cinco exfuncionarios
- martes 15 de octubre de 2024 - 12:00 AM
No pasaron ni dos días desde que la Policía Nacional (PN) informó de una recompensa de 5 mil dólares, por la cabeza del exalcalde capitalino, Bosco Vallarino cuando este fue puesto en manos de la justicia.
La PN informó que la detención se dio en una acción operativa de búsqueda y captura en un apartamento en el corregimiento de San Francisco.
Según la PN, Bosco, al ver la presencia de los uniformados de la Dirección Nacional de Inteligencia Policial (DNIP), decidió entregarse sin poner resistencia.
Bosco, quien fue alcalde de la ciudad de Panamá entre 2009 y el 2012, era buscado por delito contra la administración pública en la modalidad de corrupción de servidores públicos.
Pero en 15 días han aparecido exfuncionarios, que parecía que se lo había tragado Panamá, para no decir la tierra. El primero fue el exrepresentante de Calidonia Ramón Ashby, quien tiene una condena de 60 meses de prisión por el delito de peculado. A este se le negó recientemente una solicitud de reemplazo de pena por trabajo comunitario.
Luego, le siguió Giacomo Tamburelli, exdirector del extinto Programa de Ayuda Nacional (PAN), quien fue capturado el pasado viernes 4 de octubre en el corregimiento de Ancón. Tamburelli era requerido por el delito de peculado y tiene una condena de 48 meses de prisión por irregularidades en el proyecto de “Compra de Alimentos Deshidratados”.
Tamburelli también fue condenado a 96 meses prisión por un caso ligado al manejo irregular de fondos para la creación de programas de infraestructura, en Herrera.
Otro que salió de su escondite y se entregó a la justicia fue el exministro Guillermo Ferrufino. No habían pasado ni tres días de la captura de Tamburelli cuando el exfuncionario decidió hacerle frente a la justicia.
Ferrufino se entregó en el corregimiento de Ancón, el pasado 7 de octubre. Él y su esposa Milena Vallarino fueron condenados en febrero de 2022 a seis años de prisión, cada uno por el delito de enriquecimiento injustificado.
Al cabo de cinco días de la acción de Ferrufino, la PN ofreció una recompensa de cinco mil dólares por la cabeza de dos exalcaldes, Bosco Vallarino y Pedro Sánchez Moró. Ese mismo día, arrestaron a Sánchez Moró, en el corregimiento de Barrio Colón, en La Chorrera.
Sánchez Moró fue alcalde del distrito de Arraiján desde el 2014 al 2019, y era buscado por delito contra la administración pública, modalidad por peculado. Sánchez Moró y su exjefe de Recursos Humanos de esa institución, Omar Rugliancich, tienen una condena de siete años de prisión.
Mientras que Bosco Vallarino se sumó a los exfuncionarios que en este mes de octubre han sido colocados tras las rejas. Vallarino fue condenado a 48 meses de prisión el pasado 7 de agosto.
Para el abogado y catedrático Antonio Bernal, estas cinco acciones recientes evidencian la negligencia del Ministerio Público (MP) y de las autoridades, que no tuvieron la voluntad de tomar las medidas correspondientes respecto a los prófugos. Ahora, “sublimemente”, se están realizando arrestos a diestra y siniestra, algo que no se hizo en años ni meses anteriores.
“Esto pone de manifiesto una omisión de funciones, especialmente por parte del MP”, subrayó Bernal.
Para el abogado, esta situación no solo refleja corrupción, sino también complicidad en estos casos, y en otros como los de bandas criminales, en los que el MP mira para otro lado.
Otro que reaccionó fue el activista de derechos humanos, Luis González, quien hizo énfasis que había lentitud en la justicia porque no había interés en ubicar a los prófugos, a pesar de que era un secreto a voces que estaban en Panamá. Afirmó que, aunque tarde, se lograron las capturas y que espera que estos individuos paguen por los daños causados. También señaló que estas detenciones envían un mensaje a las autoridades actuales: que deben mirarse en ese espejo, ya que tarde o temprano, la justicia siempre llega.