El lago Gatún sigue en recuperación, las primeras lluvias no han sido suficiente
- martes 16 de abril de 2024 - 12:00 AM
El lago Gatún aún no se recupera del todo de la sequía prolongada, pese a las pocas lluvias que se han registrado en el país y que incluso ha causado inundaciones en zonas de la capital y hasta Colón.
Esta fuente, que abastece las potabilizadoras de Mendoza, Laguna Alta, Monte Esperanza, Miraflores, Sabanitas, Escobal, Cuipo y Gatún, se encuentra en 2 pies y medio, y según Ricaurte Vásquez, administrador del Canal de Panamá, está por debajo del mismo nivel del año pasado.
En marzo, un informe del Instituto de Meteorología e Hidrología de Panamá (Imhpa) indicó que el fenómeno de El Niño se está debilitando gradualmente y que espera que para el segundo trimestre del año ceda paso al evento de La Niña.
Ese aumento del paso de los navíos por el Canal se podría dar, según el administrador, por las últimas lluvias, la mejor reutilización del recurso y la combinación de buques.
Vásquez, otra vez, manifestó que se debe realizar una revisión integral de las fuentes de agua.
Cabe señalar que se ha venido solicitando al Estado la definición de la cuenca hidrográfica del Canal para encontrar una solución a largo plazo.
La disminución en la confiabilidad del tráfico de los buques por el canal, puede hacer que los clientes puedan optar por otras rutas.
Normalizar el tráfico no será de ya para ya, el Canal de Panamá ha señalado que espera que se de completamente en el 2025.
El tránsito de buques está restringido a 27 diarios de 36, debido a la fuerte sequía que afecta desde el año pasado a los lagos artificiales que alimentan la vía interoceánica, la única del mundo de agua dulce.
En enero de este año, Vásquez, explicó que las restricciones de tránsito aplicadas desde el año pasado causarán una merma de $800 millones de dólares en los ingresos por pesos del canal en este año fiscal.
Hay que resaltar que el lago Gatún es 10 veces más grande que Alajuela, por lo tanto, requiere de mucha más agua de las lluvias para llenarse a un nivel óptimo para enfrentar la estación seca que se avecina.