¿Debate o zoquetería?... una opinión

Han pasado dos años, y aunque muchos parecen no haberse percatado del fraude, algunos hacen como si no lo fuera. La enfermedad causada por el covid-19, varía en cuanto a su expresión, de acuerdo a la edad, peso y estado de salud; con el tratamiento adecuado se controla, sin hospitalización y con una tasa de sobrevida que duplica a la del virus de la gripe estacional. La ineficacia de la inoculación con el agente experimental es irrefutable, no previene la enfermedad y lo peor, ya se han consignado múltiples efectos adversos.

Los niños, rara vez desarrollan la enfermedad o bien pasa desapercibida; por lo que, no hay razón para vacunarlos niños. Además, que los riesgos rebasan a los hipotéticos beneficios. El 20 de marzo 2022, el Wall Street Journal publicó: ‘Florida va a ser el primer estado en recomendar oficialmente no vacunar contra el covid-19 a niños sanos'. Las autoridades de salud deben conocer la información, por lo cual es incomprensible que, entre otros mandatos, mantengan la inoculación de menores de 12 años, los requisitos sanitarios de ingreso al país y la campaña de promoción del miedo.

Desde hace semanas, muchos países abandonaron el cuento de la agresividad de las mutaciones, como la asociación de la variante Omicrón con la tercera ola, precisamente al reconocer que su alta diseminación y bajo índice de patogenicidad, constituía un indicativo de la transición hacia el estado endémico de la enfermedad. Aquí, el 23 de marzo 2022... en un noticiero matinal, se anunció: ‘se recibieron 48,000 dosis de vacuna pediátrica, para proteger a la niñez panameña'. Después de medidas extremas de presión, en la comarca Gnäbe-Buglé, el gobierno, aceptó que la vacuna sea voluntaria; aunque, en la mayoría absoluta de sus centros escolares continúan exigiendo la constancia de la ‘vacuna'. Hace poco, en la capital circuló una volante entregada a un alumno de primaria, rotulada así: ‘Ministerio de salud. CSS. Programa Ampliado de Inmunización. Formulario de relevo de responsabilidad. Yo, _, con CIP__, Tutor (a) de_. No deseo aplicarle la vacuna de __; asumiendo todas las consecuencias que este rechazo ocasione y relevo de toda responsabilidad civil o penal a los responsables de la aplicación de la misma'. ¿Hasta cuándo?

En otras latitudes, los medios ya eliminaron al covid-19, como base de la pornografía del miedo reemplazándolo con el cambio climático; aquí lo mantienen. Hasta hace poco, aparecía en la tv una cuña publicitaria que promovía la vacunación así: ‘panameño no seas zoquete, vacúnate! La Real Academia de la Lengua Española define el término zoquetear así: actuar o comportarse como un zoquete o un mentecato, o sea: tonto, falto de juicio, privado de razón. Sin haber dicho cuáles fueron las evidencias que los motivara, suspendieron la cuña. Basta de censura y manipulación psicológica; el daño causado a la salud, sobre todo mental y especialmente de los niños; de la economía, la educación etc. ha sido demasiado grande; lo racional es debatir lo ocurrido en los dos últimos años, a fin de hacer los correctivos para la recuperación; antes que las brechas continúen profundizándose, ratifiquemos la zoquetería y seamos uno de los últimos países en reiniciar la recuperación integral... Usted qué opina?