Balas le robaron una campeona a Panamá
- domingo 19 de febrero de 2017 - 12:00 AM
HISTORIA
La Villana tenía un sueño desde que era niña: ser boxeadora y cualquiera que se metía con ella en las calles de su barrio sentía la fuerza de sus puños.
-Peleaba cuatro veces al día- confiesa.
Hace 5 años no pudo esquivar el derechazo de una desgracia que la golpeó y la dejó inválida, postrada en una silla de ruedas.
Ella lo recuerda bien. Fue el 21 de julio de 2012. Se hallaba en la casa de una amiga en el sector conocido como Nuevo Amanecer, en Curundú, un pequeño barrio compuesto de casas de madera y donde son constantes las balaceras.
Su amiga la peinaba frente al espejo entre conversaciones y risas. Quería verse bonita antes de dirigirse al gimnasio Rockero Alcázar donde entrenaba todo los días. No supo de dónde vinieron las balas. Solo escuchó ¡Bang! ¡Bang! ¡Bang! Y luego sintió varios impactos en su cuerpo. Se desplomó en medio de un charco de sangre. Tres balas se habían alojado en su espalda y otro en el brazo izquierdo. La llevaron al hospital.
Mala noticia
-Usted nunca más va a volver a caminar- le dijo el doctor tras los exámenes.
-Quería morirme, qué iba hacer con mis tres chiquillos- recuerda Dina Luz Murillo Palacios, mejor conocida como ‘La Villana', sentada en una vieja cama, con la espalda recostada a la pared de madera.
Sueño frustrado
‘La Villana' reside con su sobrina en una pequeño cuarto de madera y zinc donde el calor es insoportable. En la habitación hay un televisor encendido, una vieja silla de ruedas, un abanico , un vaso con su cepillo de dientes y trastos viejos.
-Yo pensé que me iba a morir y pensé en mi mamá, porque yo le había prometido que algún día le iba a dar el regalo de ser campeona de boxeo y ahora me pasaba esto.
Esto le cambió para siempre la vida a ‘La Villana'. Ella, que soñaba ser como las boxeadoras Ana Pascal o Chantal ‘La Fiera' Martínez (con quien hizo exhibición de bo- xeo amateur en el Rockero Alcázar). Ella, que esperaba ser seleccionda para competir en los Guantes de Oro 2011. Ella, que soñaba con pelear con las más grandes boxeadoras fuera del país, ahora se encontraba inválida en una silla de ruedas por culpa de una balacera.
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