Amenazas de muerte, y hasta burlas, en caso de Ricardo Martinelli

JUDICIAL

Mientras que los abogados querellantes dentro del proceso ‘pinchazos', seguido en la Corte Suprema de Justicia (CSJ) contra Ricardo Martinelli, volvieron a recalcar ayer que se reunieron con el expresidente por invitación de él en el Centro Penitenciario El Renacer y donde se habla que les ofrecieron 75 mil dólares a cada querellante para desistir de sus acusaciones, la defensa del exmandatario lo negó y aseguró que son los denunciantes los que han pedido a Martinelli acercamientos.

Amenazas

Carlos Herrera Morán, representante legal de Mauro Zúñiga, uno de los querellantes, advirtió que Martinelli utilizó las tres reuniones para hacer amenazas contra ellos. ‘Diciendo que él tiene vídeos, grabaciones, intercepciones telefónicas que comprometen a personas como Balbina Herrera y Mitchel Doens', dijo el jurista, al tiempo que agregó que las amenazas hasta fueron de muerte. ‘Dijo... mejor acepten lo que les voy a dar o utilizo la motosierra, hasta donde yo sé, los caballeros templarios y la mafia usan las motosierras para desmembrar a sus enemigos', dijo.

Por su parte, Sidney Sittón, abogado de Martinelli, indicó que el acercamiento de los querellantes fue una propuesta de ellos y no de su defendido. ‘Tienen una precariedad increíble, una agonía económica. Si dicen que quieren justicia, no tienen nada que ir a la cárcel a hablar, pero si han ido, es porque buscan dinero', dijo.

Pruebas admitidas

Las declaraciones de ambos ocurrieron durante la realización de la audiencia preliminar contra el exgobernante ayer, en que el juez de garantías, Jerónimo Mejía, admitió 58 pruebas testimoniales de la fiscalía y querellante autónomo y 14 pruebas testimoniales en común. En cuanto a cuatro pruebas testimoniales aportadas por el fiscal y objetadas por la defensa como ilícitas, se admitieron tres, incluso un testigo protegido y no se admitió una sobre un testigo con voz e imagen distorsionadas. Sobre las 48 pruebas documentales aportadas por el fiscal, se admitieron casi en su totalidad, entre ellas, la transcripción de los siete cuadernillos contentivos de las escuchas telefónicas. En cuanto a las cinco pruebas periciales aportadas por el magistrado fiscal, se admitieron todas al considerarlas como lícitas.