La Alerta Amber y el plagio de menores

¿LLAMADO DE ATENCIÓN, ENSEÑANZA O ESPERANZA?
  • martes 20 de septiembre de 2022 - 12:00 AM

Hace escasos días el país se levantó con una preocupante noticia, la niña Aderlyn Mallenis Llerena Saldaña estaba desaparecida desde el 13 de septiembre de 2022.

Testigos relataban que había sido llevada a la fuerza cuando iba camino hacia la escuela Gabriel Lewis Galindo en Rufina Alfaro, distrito de San Miguelito.

Con el paso de las horas, otras versiones surgieron, una era que fue llevada por un vehículo de color gris al colegio, pero en las cámaras de seguridad no se visualizó el mencionado auto. Otra de las versiones detallaba que no pasó el puente sobre la quebrada, sino por el área del Corredor Norte.

El evento ocurrió en un área boscosa de San Miguelito. El abuelo desesperado solicitaba a las autoridades que ejecutaran diligencias de allanamientos en las inmediaciones de la casa de la menor.

Nuestro país en términos generales siempre tuvo un ambiente bastante seguro y confortable en lo que se refiere a la crianza de niños y adolescentes. En las décadas de los 60, 70, 80 y 90 era normal ver a la gallada en las calles del barrio divirtiéndose con juegos populares y deportes.

Muchos acudían a sus escuelas a pie o en busitos escolares. A los niños y jóvenes, que sus padres no les permitían salir de manera asidua a las calles, jocosamente sus amigos les decían: ‘capitán rejilla'.

Con el paso de los años, la sociedad ha evolucionado en diferentes escenarios, desde la composición del círculo familiar y el entorno tecnológico, hasta la sofisticación de las organizaciones o grupos criminales; a nivel nacional e internacional. En esos entornos dinámicos, el plagio y tráfico de menores es una preocupante realidad.

Estos plagios en el pasado se observaban como realidades de ciudades de alta densidad de población en América Latina, como el Distrito Federal de México o Bogotá; evidentemente que cada día, se vuelven parte de nuestro quehacer cotidiano.

En Panamá, las alarmas se encendieron en la mañana del 8 de febrero de 2003; cuando la niña Mónica Serrano García, de tan sólo un año y medio de edad, fue sustraída de su hogar en el distrito de Arraiján. A sólo meses de cumplirse 20 años de tan delicado y doloroso evento, se desconoce aún de su paradero. Su madre Mónica García, en la obra: ‘Volveré a abrazarte, Mónica', hizo interesantes precisiones, sobre las vivencias en el caso de su hija: ‘lenta reacción de las fuerzas policiales, poco interés de las autoridades competentes, falta de recursos y de iniciativas en las instancias judiciales para aclarar el caso'.

La realidad de nuestros días, en donde por lo general, ambos padres salen a trabajar y los niños quedan en manos de terceras personas; porque se les hace difícil acompañarlos en sus actividades de estudio o extracurriculares, son espacios aprovechados por criminales, para el plagio de menores con la intensión de vender sus órganos, enviarlos a otros países para adopciones clandestinas, insertarlos en organizaciones delincuenciales, enviarlos a formar filas de grupos insurgentes o convertirlos en esclavos sexuales.

En los entornos dinámicos que vivimos, la ‘Alerta Amber' o Sistema de notificación de menores de edad desaparecidos, sin duda, es una ayuda muy valiosa. Se implementó en diversos países, desde 1996 y su significado en el idioma inglés es: ‘America Missing Broadcast Emergency Response'. El nombre ‘Alerta Amber', proviene de los Estados Unidos, específicamente por la menor ‘Amber Hagerman', niña de 10 años secuestrada en Texas en 1996 y días después localizada sin vida.

Las primeras horas después de un plagio, son vitales y por ende el sistema recomienda que la alerta sea emitida por medios de comunicación, radio, mensaje de texto, whatsapp, redes sociales, correos electrónicos y pantallas electrónicas.

La República de Panamá, mediante la Ley 230 de 24 de junio de 2021, creo el Sistema de Alerta Amber y el objetivo de la nueva legislación es que exista alerta y colaboración del sector público, privado, medios de comunicación social y sociedad civil para la ubicación de menores en caso de ausencia, sustracción, secuestro, extravío y privación ilegal de la libertad.

Se crea una web con información de los menores de edad reportados, protocolos de actuación y un comité con representantes. La alerta de difusión no puede ser menor de cinco horas ni mayor de 24 horas, salvo que se amplié la alerta por existir influencia adicional del caso.

El primer círculo de protección de todo niño o joven, es el más cercano; sus padres, hermanos y familiares. Nuestros niños, son un tesoro precioso, débil y vulnerable; como adultos tenemos la responsabilidad de preservarlo.