Historia de las relaciones de Panamá con los Estados Unidos

- lunes 14 de abril de 2025 - 12:00 AM
Un juicio histórico imparcial, con alegatos rigurosos y una profunda evaluación de los hechos ocurridos el 15 de abril de 1856, demostrará con certeza el asalto perpetrado contra la población civil de Panamá. La construcción del ferrocarril aceleró el tránsito de viajeros, lo que provocó una insurgencia entre estadounidenses y panameños. Antes de su construcción, el traslado doméstico entre Panamá y Colón era una dificultad constante debido a las torrenciales lluvias.
Las poblaciones dispersas y empobrecidas sirvieron como refugio temporal para los viajeros que transitaban de la costa de Colón a la ciudad de Panamá antes de la construcción del ferrocarril. La inauguración de este, el 28 de enero de 1855, aceleró significativamente la llegada a las ciudades terminales.
En un lugar conocido como La Ciénaga, adyacente a lo que hoy se conoce como el Mercado del Marisco—anteriormente un área pantanosa cerca de la estación del ferrocarril—, las investigaciones señalan que un grupo de estadounidenses descendió del tren en la ciudad de Panamá. En su recorrido, bajo los efectos del alcohol, se acercaron a la tienda de Manuel Luna.
El suceso quedó registrado en los interrogatorios a los implicados en los hechos. Manuel Luna, uno de los principales investigados, declaró: “Hallándose el que declara en dicho barrio, llegaron unos americanos un poco ebrios, en número de tres o cuatro, y entre ellos uno llegó a varios ventorrillos para hacer negocio con los productos que en ellos había. Finalmente, llegó a quien declara y tomó una tajada de sandía, preguntando cuál era su valor. Se le contestó que un real. Entonces, comenzó a comerla y, aun sin haberla concluido, la tiró al suelo y se dio la vuelta. Ante esto, el exponente le exigió el pago del real, pero solo recibió como respuesta estas palabras: ‘¡Oh! No me emporrés, bésame el culo’. A lo que el que habla respondió: ‘Cuidado, que aquí no estamos en los Estados Unidos; págame el real’” (Gaceta del Estado, Panamá, 26 de abril de 1856. Gobernación del Estado de Panamá. Interrogatorio realizado a Manuel Luna).
Otras indagaciones se llevaron a cabo para identificar a los responsables del incidente del 15 de abril de 1856. Sin embargo, las versiones recopiladas se contradicen. Una de ellas fue la del superintendente del ferrocarril, quien acusó a los panameños de provocar el enfrentamiento.El incidente llevó a que se tocaran las campanas de la iglesia de Santa Ana, una práctica común cuando se producían incendios. Los moradores del arrabal y algunos de intramuros, creyendo que se trataba de un siniestro, acudieron a la iglesia. Al llegar, alrededor de las cuatro de la tarde, comentaron entre ellos tras escuchar disparos provenientes de La Ciénaga. Al percatarse de que no se trataba de un incendio, uno de ellos exclamó: “Es otro 18 de mayo”, en referencia a un enfrentamiento similar ocurrido anteriormente.
Aquel 18 de mayo se había registrado un incidente similar, con un enfrentamiento entre estadounidenses y panameños. La historia de quienes se consideraban una raza superior se repetía. En este caso, los transeúntes que viajaban de la costa de Colón a Panamá incluían filibusteros que se dirigían a Nicaragua con la intención de derrocar al gobierno de ese país hermano.