- viernes 14 de noviembre de 2025 - 12:00 AM
Infidencias y confidencias del 14 de noviembre de 2025
Tabla de salvación. Unos politólogos de cafetería analizaban que si Jorge, el Jefe de la Cueva, no gana la interna ñame, su carrera no solo se desinflaría sino que también se esfumaría la última bocanada de oxígeno de Cachaza antes del juicio final.
Invasión. Dice el que se esconde detrás de la puerta de la cocina de la directiva del Cajetón que ayer, luego que los miembros habían comido pebre fino y abundante llegó una turba casi tumbando las puertas que les puso los pelos de punta.
Invasión 2. Dice que eran envenenados del jarabe los que entraron a la fuerza y sin que la seguridad, todo un ejército, pudiera contenerlos. Los jefes fueron los primeros en salvar el pellejo. Qué querían, eso voy a preguntarle a Aniano.
Presionando. A pocos días de la instalación de la mesa del salario mínimo los cabecillas obreros empezaron a presionar para que los incluyan en el tema. Son los mismos de siempre que nunca han llegado a un consenso. Bellacos.
No son santitos. Sobre los hechos sangrientos que se vienen registrando que dice Molino de Viento que se están dando piso entre los malandros. También han muerto féminas en manos de sus exparejas.
Se la aguantan. Hay lamentos de la people que acude a la Cueva ahora que los dipus están de largas vacaciones. Cierran los baños y la gente tiene que aguantársela. Ojo Jorgito que eso resta.
Lavadero. Una diputada de Bocas se quejó que su carro una camioneta de lujo la podrían chocar porque su estacionamiento estaba cerca a un lavadero de autos en la Cueva. El chief ordenó que no se lavaran más autos y ahora hay otro negocio en ese sitio.
Catarsis. Por ahí el Jinete Blandoncito recordando con nostalgia sus tiempos en el Hatillo con la dama que ya no se amarra a los palos y los centenares de millones que manejaba y licitaba en obras del impuesto. Era maná del grueso.
Explotó. En el municipio capitalino se le acabó la suerte al man del tumbao, lo agarraron en negocios de las tapas de alcantarillas y cobrándole a buhoneros. Esto le costó el puesto de jefe y lo mandaron al valle de los caídos.
Nueva camada. Un exmiembro de la FD de los tiempos del Man está observando unos muchachos uniformados con actitud de cadetes. Parece que no tienen los 18 años y quién sabe si estarán juramentados. Eso ocurre en la tierra del ganao bravo.
Tiembla, tiembla. En la Altiva dicen que el burgomaestre está que corta: te cuadras o te cuadro y eso que tiene un casito de tierra por San Carlos y los funcionarios no se atreven a investigarlo. Eso huele más a tema de fiscalía.