Infidencias y confidencias

Glosas de la realidad política de Panamá.
  • domingo 03 de noviembre de 2013 - 12:00 AM

Me mandaron a preguntar si es cierto que en la entidad marítima de Diablo hay un medio chief que ganó para correr a repre de la vista más bella, pero como no quiere dejar la papa ahora pasó a ser asesor portuario. ¿Y el fiscalillo electoral?

Hablando de la entidad del mar, me preguntan qué pasa en las oficinas de Asia y Europa que a cada rato envían hacia ellas a funcionarios de dos en dos con viáticos exorbitantes y hasta por dos semanas. ¡Qué viva el cambio!

Luego de que la Guadañita se bajó del trono, me contó un túngara que la pregunta entre los del disco rayado es a quién van a bajar por la ampimizada. ¡Atajaaaa!

Continuando con la bajadera, el que se rasca la cabeza por la preocupación es el mandamás después del puente, porque las primarias las ganó por 70 votos y está en la lista de los negociables. ¡Ay, padre!

Un sapo de la tierra de Lucas Bárcenas me sopló que los comemonos harán un acto simbólico en el desfile a las 11:30 de la mañana por el tema de la décima estrella.

Me dicen que el que está que salta en un pie en la tierra de Urracá es el chavo perredoso, porque la candidata expanadera se desinfló y desde adentro le están quitando el apoyo.

El necio en la tierra de Urracá dice que el candidato a mandamás ha pasado por varios estados de ánimo, de mueca a sonrisa y a mueca de nuevo, con el tema de la ruptura de la alianza oficialista.

Me contó un sapo que durante el recorrido por el camposanto en Amador, una dama le solicitó apoyo económico al presi y este dijo: ‘Haré algo que no estoy acostumbrado a hacer’, mientras sacaba de su cartera un billete para entregárselo a la dama.

Me contó un túngara pollero que el que tirará la casa por la ventana hoy en Juan Díaz es Augusto Valderrama, quien fue designado abanderado en los desfiles de hoy, 3 de Noviembre.

Me dijeron que la que no pega una es la mandamás cultural del país. Primero puso el emblema nacional en el piso y ahora resulta que el cementerio de Corozal, que le traspasó Roxi, es una verdadera jungla. Que viva el cambio.

Un usuario del retrobús se queja porque cada vez se le hace más difícil recargar su tarjeta. Hay locales que brindan el servicio después de las 3 de la tarde y casetas que cerca de la medianoche ni transmiten ni reciben. ¡Ojo!

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