Vienen los asaltos de campeonato

Llegó la hora. La cartilla decembrina está llegando al tramo final, a los denominados ‘asaltos de campeonato’, donde hay que cerrar fuerte, buscar un último aire y tirar con todo.

El consumismo es el principal recurso del oponente, y Pablo Pueblo debe estar muy pendiente, para que no lo conecten con la gastadera, que en otras peleas ha dejado a varios pugilistas en serios aprietos.

Hay que terminar de comprar los juguetes de los pelaos, sí o sí, pero chifeando los golpes de los precios altos, moviéndose por todo el tinglado para encontrar los mejores precios: bueno, bonito y barato.

Se buscan juguetes, pero esto no es un juego. La pelea en la calle es cosa seria. La cartera sangra y se reciben fuertes combinaciones por diferentes flancos, es una situación complicada, sobre todo para los pugilistas desempleados o que viven el día a día, de camarón en camarón.

Para estos pugilistas la pelea estará color hormiga. Pero si hasta aquí se han mantenido firme, están obligados a sobrevivir la oleada de golpes finales.

Sin duda que se avecinan los asaltos más complicados. Es hora de estar más vivos que nunca y moverse bien por el cuadrilátero. ¡Animo campeón, hay que terminar con dignidad la pelea de fin de año!