Unas "perlas" gloriosas de nuestra historia (7)

Dice Rodolfo Aguilera que el istmeño, JUAN PÍO VICTORIA, patriota adinerado, temeroso que se incumpliera la Capitulación del Batallón Fijo (español), ORGANIZÓ con otros valientes, la resistencia con 200 fusiles.

El comandante del Batallón Fijo, don Isidro de Diego, aconsejó a sus oficiales y soldados en el cuartel: “Paisanos y amigos: con la fuerza a mi mando puedo debelar a los insurgentes del Istmo; pero varias consideraciones me hacen abstenerme de operar:

1ro. Que entre los insurgentes hay hijos y nietos de españoles.

2do. Que, si venciéramos a los insurrectos de aquí, ningún provecho se obtendría, porque Bolívar está cercano con 6,000 hombres y tenemos todas las probabilidades de perder. Así que procuremos evitar la lucha”.

Por órdenes de José de Fábrega, organizó un batallón en el arrabal santanero, poniendo de su fortuna 10,000 pesos de la época. La sangre istmeña y española no se derramó en la Villa de Los Santos el 10 de noviembre, ni el 28 de noviembre ni el 1 de diciembre de 1821.

Juan B. Sosa, en un artículo de su autoría, publicado en la Revista Lotería en 1947, habla sobre los panameños en Junín y Ayacucho en 1824. Me llamó la atención el testimonio del Teniente Coronel OConnor, instructor de las milicias de los Batallones del Istmo 1, 2 y 3: “El Ejército Realista (español) estaba conformado por 9,310 hombres y el Ejército Unido Libertador era solo de 5,780.

El capitán Jorge Brown (quién se había entrenado con los Batallones del Istmo) fue quien clavó la bandera republicana en la falda del Cundurcunca (Ayacucho, el 9 de diciembre de 1824): la misma bandera que yo había mandado hacer en Panamá para mi antiguo Batallón del Istmo”.

Y Ernesto Castillero nos dice que de los jóvenes panameños que lucharon por la independencia sureña, 5 llegaron a generales por méritos: José de Fábrega, José Domingo Espinar, Fernando Ayarza, Tomás Herrera y José Antonio Miró.

¿Qué hará el Ministerio de Educación y el Ministerio de Cultura para conmemorar las Batallas de Junín, Matará y Ayacucho?

¿Qué harán las universidades públicas y privadas?

¿Y qué harán los clubes cívicos que cada año reclaman “los valores cívicos” de nuestra sociedad?

¡RESCATEMOS EL BICENTENARIO DE LOS BATALLONES DEL ISTMO!

Cónsul de Panamá en Lima , Perú