Generalmente hoy es un día de renovación, esperanza y grandes expectativas. El cierre de 2022 llegó con gran carga emocional para nuestra familia por condiciones de salud y damos la bienvenida al nuevo 2023 con ese mensaje conciliador de un galeno de pequeñines: ¡Un día a la vez!.
Y es que las familias panameñas experimentan pruebas en diferentes ámbitos: desde pérdidas físicas y materiales hasta ausencia de norte claro. No obstante, la llegada del año del Conejo de Agua, según el Calendario Chino, permite hacer el alto correspondiente para respirar y avanzar, pues simboliza vigilancia, ingenio y mente rápida. Es impulso, fe, amor propio y deseos sinceros de fortalecer la familia y estrechar lazos de verdadera amistad.
Conscientes estamos que no todo es color de rosa o “Viva Magenta” (color del 2023 según Pantone), reflejo de buena vibra y positivismo. Sin embargo, al tener presente la idea de “un día a la vez” mantenemos vivo el espíritu, valoramos el entorno, disfrutamos de nuestra gente, independientemente de las condiciones, permitiéndonos ser resilientes.
Para el país, los retos de un año preelectoral como el 2023, con censo poblacional y de vivienda incluidos, conllevan calendarios, reflejo de organización y apelan al sentido de responsabilidad y compromiso, “un día a la vez”.
Periodista.
