Tiembla en España

Por la política, tiembla. Y el calor atiza. Es inicio de verano y las temperaturas se disparan hasta los 45 grados. Muy incómodo. Con todo, 35 millones de habitantes están convocados en elecciones generales para determinar qué grupo controlará el poder político, hoy en manos de la izquierda, el PSOE y aliados.

Con mucha fuerza, se ha puesto en primera fila la derecha, liderada por el Partido Popular, y se calcula que desbancará al PSOE del poder. Poder que ostenta desde 2018, cuando Pedro Sánchez sustituyó al conservador Mariano Rajoy, del PP.

Después de la dictadura franquista, que dominó 40 años, se ha producido una alternancia del poder en los últimos 40 años. Los dos grupos -conservador y liberal- han estado sometidos a los vaivenes mundiales y europeos, la migración, la economía, los conflictos, y las gestiones de ambos se han caracterizado por escándalos de corrupción.

Ni las finanzas ni la migración ni el desempleo están en juego hoy, Más bien qué visión tiene cada agrupación de España, donde han corrientes separatistas e independentistas fuertes, sobre todo en Cataluña y en el País Vasco.

Cataluña, por la vía pacífica y a través de sus autoridades legítimas regionales y locales, se declaró independiente de España y reclamó ser república en 2017, en un movimiento que no fue apoyado por ningún Estado.

El PSOE debió gobernar en coalición con grupos catalanes y alguna formación vasca, que incluso es sucesora del grupo terrorista e independentista ETA, desmovilizado.

España tiene un régimen político de monarquía parlamentaria. Si el PP no obtiene la mitad más uno de los 350 escaños del Congreso, le tocará gobernar a su líder, Alberto Núñez Feijoó, en alianza con Vox, una dinámica formación emergencia de ultraderecha y dirigida por Santiago Abascal. A la izquierda del PSOE, se perfila la formación Sumar, de la lideresa Yolanda Díaz, vicepresidenta y ministra del Gobierno de Sánchez.

PERIODISTA