• jueves 06 de febrero de 2020 - 12:00 AM

Somos insensibles, irresponsables y crueles

La situación que sufren nuestros estudiantes que regresan de China, producto del coronavirus en aquella nación

Panameños: nos estamos convirtiendo en seres insensibles, irresponsables y crueles. En los anales de nuestra historia y lo poco leído, desde la masacre de la conquista española a la fecha, nunca hemos sido tan irresponsables e inhumanos, repudiándonos a nosotros mismos, nuestros hijos, nietos, hermanos o a otros compatriotas.

La situación que sufren nuestros estudiantes que regresan de China, producto del coronavirus en aquella nación, jamás debería hacer de nuestro comportamiento hospitalario una ola de terror injustificado, sea por desconocimiento o ignorancia, independientemente, es irresponsable e irracional.

Es de todos conocido que ellos no traen el virus, que si bien deben mantenerse en cuarentena, por cuestiones de seguridad médica, es otra cosa. ¿Acaso cuando estamos resfriados asistimos a lugares de conglomerados? Obviamente no.

Lo sucedido en la comunidad de Pacora y el desplazamiento de esos jóvenes a otro habitad, no tiene razón de ser, pero eso nos muestra la falta de credibilidad de la población a los gobiernos politiqueros que nos han gobernado, por lo cual hay que trabajar en la ‘creación' de conciencia ciudadana.

Una población que tiende a despreciar a sus propios congéneres, pero que aplaude y sigue a quien asesina y le matan de hambre, sin educación ni medicamentos, como son los políticos corruptos, no tiene perdón de Dios.

Esperemos que la población reflexione, que los medios cumplan con su rol de orientación, educación e información, para que la ignorancia no tenga cabida ante situaciones como la actual.

Tenemos una población harta de terror y resentimientos reprimidos insospechados, producto del estrés, inestabilidad económica o social, educativa y de salud.

Es necesario crear programas radiales y televisivos educativos, que no sólo vendan esperanza, que la población la viva, que la educación se sienta y la salud deje de ser una necesidad insatisfecha.

Nos exasperamos por el advenimiento de nuestros compatriotas, pero somos sordos, ciegos y mudos cuando pasan submarinos y barcos por el Canal con carga nuclear y eso es más peligroso. Dios te salve, Panamá.

ECONOMISTA, EDUCADOR, HUMANISTA.

Últimos Videos