Seguro de desempleo y renta básica universal

Si algo claro se sacó de la Mesa del Diálogo de julio pasado fue develar los monopolios existentes en materia de alimentos, combustible y medicinas; pero también remarcar en la distinción entre modelo y sistema económicos, lo cual se dio, sobre todo, gracias a las didácticas intervenciones de la economista Maribel Gordón, hoy, precandidata a la Presidencia de la República por la libre postulación.

Francis Fukuyama, politólogo estadounidense, en 1992 habló del ‘fin de la historia', para ilustrar un supuesto fin de la ‘lucha de las ideologías' y el triunfo absoluto del neoliberalismo. Sin embargo, 30 años después el mundo cambió a costa de grandes sufrimientos humanos y de millones de víctimas del covid-19.

La Gran Depresión de 1929 y las dos guerras mundiales llevaron a la adopción del modelo económico (dentro del capitalismo) conocido como ‘estado de bienestar, más que nada en Europa, donde el Estado asume un papel interventor en la economía y es quien debe brindar los servicios públicos a toda la población.

En Panamá, la Constitución de 1946 recogió algunas expresiones de ese modelo, al plasmar la posibilidad de un seguro de desempleo o de paro forzoso, así como el intervencionismo estatal para hacer efectiva una ‘justicia social'; disposiciones éstas que se mantienen en la actual Constitución.

Sin embargo, con la adopción del modelo neoliberal por los sucesivos gobiernos, estas disposiciones constitucionales quedaron en letra muerta. El seguro de desempleo nunca se desarrolló en la Ley. El mismo, garantizado con un fondo de la seguridad social, hubiera podido sortear la pandemia sin necesidad de endeudarnos como pasó (para asegurar el pago del bono solidario y vale digital), manteniendo reactivada la economía.

A nivel mundial se ha estado hablando de la Renta Básica Universal (RBU) desde el 2013 en Europa. Consiste en el ingreso que tendría todo ciudadano y residente de un país a recibir una suma de dinero periódica que cubra sus necesidades básicas, indistintamente de su posición social o de si trabaja o no. Economistas como Yanis Varoufakis, políticos como Juan Carlos Monedero y empresarios como Mark Zuckerberg, Bill Gates y Elon Musk, propugnan por ella y señalan que es inevitable ante la inminente pérdida de millones de empleos que implicaría la automatización de la producción a nivel mundial.

Aparte de Maribel Gordón que propugna por un ‘modelo económico por una vida digna' quisiera observar en los otros candidatos a la Presidencia, propuestas de cambio del actual modelo neoliberal depredador imperante.

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