• viernes 26 de octubre de 2012 - 12:00 AM

JCI, un recodo de esperanza

La JCI de Panamá, organización no gubernamental de la sociedad civil, antes conocida como Cámara Junior, el pasado 23 de octubre present...

La JCI de Panamá, organización no gubernamental de la sociedad civil, antes conocida como Cámara Junior, el pasado 23 de octubre presentó su gala anual en la que premió a jóvenes sobresalientes en diez categorías, en momentos en que Panamá atraviesa un mar tormentoso de contradicciones y sobresaltos.

A los asistentes nos quedó claro que hay muchos valores entre los panameños, sobre todo los jóvenes. Ese día hubo tres muertos en los acontecimientos de Colón. Estas muertes se dieron por disparos de fuerzas represivas, pero la principal causa es la insensatez del gobierno autocrático que actúa enajenadamente y aupado por un séquito de colaboradores abyectos, cómplices del presidente, que se encuentran en todos los Órganos del Estado.

Creo necesario que conozcamos a estos jóvenes sobresalientes: Elvin Benítez, autodidacta galardonado en logros personales; Dalila Rodríguez, en servicio humanitario; Demetrio Díaz, en reciclaje; Isaac Casal, en cultura; Ritchell Arthur, en voluntariado, Abel Batista en ambiente; Indra Rodríguez, en academicismo; Pedro Méndez en desarrollo científico, Iván Barrios en música y Jorge Acosta en logros empresariales.

Escuchando las semblanzas presentadas y las palabras de agradecimiento de estos panameños pensaba en por qué nuestra Nación se percibe tan degradada, si tiene tantos valores, porque entendí que la JCI ya ha distinguido a 150 panameños en los últimos 15 años. Sencilla la respuesta a mi cuestionamiento: los panameños con cualidades superiores son opacados por costumbres tipo juegavivo que campean en el escenario nacional porque politiqueros como los que han actuado en los gobiernos después de la invasión, para señalar un periodo, han sido ciudadanos que nos han mostrado sus peores defectos, con pocas excepciones.

Llega el momento de que estos galardonados por la JCI y por otras tantas ONG que hacen distinciones cada año den un paso al frente, se sumen y lideren esa muchedumbre de panameños de buena voluntad que desea que resplandezca el bien común en nuestro país.

En su introducción, el presidente de la JCI de Panamá, Otto Gamboa, comentó la necesidad de buscar la paz en el conflicto colonense e hizo énfasis en que necesitamos ser regidos por ‘gobiernos de leyes y no gobiernos de hombres’.

Cabe recordar el pensamiento del dirigente ecuatoriano Eloy Alfaro: ‘Los que permanecen indiferentes al infortunio de la Nación, aunque privadamente sean laboriosos, son auxiliares inconscientes de la destrucción y ruina de sus pueblos’.

Panameños laboriosos, llegó la hora de actuar: salvemos Panamá.

FUE PRECANDIDATO PRESIDENCIAL.