- miércoles 09 de octubre de 2024 - 12:00 AM
Que sumen nuevos aportes a la CSS
Desde hace más o menos un mes se está en plena discusión de las propuestas para solucionar el tema de la Caja de Seguro Social (CSS). Hemos venido escuchando las diferentes propuestas de los sectores de docentes, trabajadores, Cámara de Comercio, organismos de salud, entre otros. Una de las propuestas que me pareció como el camino viable es la presentada por los docentes, en compañía de la gente de Frenadeso y demás organismos vinculados a Suntracs.
Es de observar, sin mayores análisis que el problema primario de la CSS es la necesidad de inyección económica para los diferentes programas y después una transformación administrativa y gerencial partiendo de una nueva legislación.
Es decir, toda una reingeniería que incluso debe pasar por elevarla a rango constitucional. Dentro de este concepto, se enmarca la discusión entre los extremos de si se adoptan medidas paramétricas, se adopta y profundiza el método de solidaridad o se continua con el sistema de cuentas individuales. Con independencia, de si estamos de acuerdo o no, en la adopción cualquier medida, es absolutamente necesario, el aporte de dineros ya sean del Estado, de la empresa privada, los réditos de los planes de inversión etc. Si esto no se hace, ningún plan será efectivo y dentro de algunos años nos veremos unos pocos de esta generación, en la misma discusión sumados a la generación que se asoma al umbral de la jubilación.
Dentro de este contexto, existe un sector poderoso de la economía nacional que son las empresas concesionarias de venta y expedido de combustible.
Este sector, fue el único que, durante la pandemia, hizo inversiones, nunca dejó de facturar a precios del mercado internacional, ya que el congelamiento del combustible no les afectó, porque sencillamente, el Estado, les cubría el monto del subsidio. Para que tengamos una idea del macro negocio, solo basta darse una vuelta por el corredor de los Pobres (más o menos 3 kilómetros) desde Villalobos hasta la entrada de la Cabima, existen aproximadamente 10 estaciones de combustible en sentido de ida y vuelta. Mucha de estas estaciones, fueron terminadas en pandemia y otras empezadas y terminadas o en proceso, después de la pandemia.
Si revisamos el área del Centenario, desde el estadio Red Carew hasta la entrada al distrito de la Chorrera hay aproximadamente 8 estaciones, sin contar con las que están en la carretera vieja, y otras en construcción. Ningún otro negocio en Panamá y retamos a cualquier economista o analista financiero a que nos desmienta, ha experimentado este crecimiento porcentual en tan poco tiempo y no solo eso, sino en pleno desarrollo de una crisis mundial de sobrevivencia y de lucha por la vida, como lo fue la COVID-19.
Por todo esto, fácil de comprobar, planteamos que dentro de las propuestas se incluya el aporte de estas petroleras y comercializadora de combustible en Panamá, y que el mismo sea de un 15% de los ingresos netos y que se destinen a las finanzas de la CSS. Y que no vengan conque van a “quebrar” o que se “van del país”, que lo usan siempre como arma comercial.