- domingo 28 de septiembre de 2014 - 12:00 AM
Un pueblo sin memoria
No se nos escapa a muchos de los que nos enfrentamos a la cruda realidad, la indiferencia, cuando no la ignorancia de nuestro pueblo, al tratar de hacer conciencia histórica de nuestro pasado, el de ayer y el de antes de ayer. Ya lo advertía Justo Arosemena en 1855 al respecto de la creación del Estado Federal de Panamá, recién aprobado por el Congreso Colombiano.
No pasaron 100 años cuando el ensayista santanero, Diógenes de la Rosa, nos decía que el pueblo panameño ‘era desmemoriado’. Y estas dos reflexiones me asaltan con motivo de las fiestas patrias de noviembre, donde gran parte de los alegres jóvenes y adultos, desconocen las fechas que celebran con tanto entusiasmo y tantos sacrificios personales y económicos.
Hacer reflexionar a los jóvenes y adultos sobre la necesidad de conocer nuestra historia, de divulgarla, de enseñarla y de clavarla en el corazón de todos los panameños, porque ella es digna de admiración, de cantarla, de honrarla y de propagarla entre propios y extraños, es una tarea de todos.
Hagamos memoria. Desde agosto de 1903, la burguesía conservadora, que dominaba el aparato oficial colombiano del Departamento de Panamá, inició la conspiración de la separación del istmo de Colombia. El rechazo casi unánime del Congreso Colombiano a la continuación de las obras canaleras con el Tratado Herran-Hay, dio paso al crecimiento de la antipatía contra el centralismo de Bogotá.
La ruina del istmo, a causa de la Guerra de los Mil Días, la persecución contra los liberales y el fusilamiento vengativo del General de la Cholada Victoriano Lorenzo, no vio más esperanza entre los hijos de Panamá que la separación del Istmo de Colombia. Allí, en un amasijo de gentes de afuera y de adentro, de liberales y conservadores, de ricos y de pobres, de blancos, mulatos y negros, de capitalinos y de interioranos amaneció el 3 de noviembre de 1903, con barcos colombianos de guerra en la Bahía de Panamá y el Batallón Tiradores en Colón, amenazando a los panameños y la marina norteamericana amenazando a los colombianos.
Continuará…..
Nota: Juan Carrete, la voz, el personaje, el artista, el amigo, el panameño, se ha ido.
*Exembajador de Panamá en Brasil y Nicaragua