- martes 17 de noviembre de 2015 - 12:00 AM
¡Predisposición a ser dominados como pueblo!
En el mes de noviembre, como en ningún otro, se exacerban todas la expresiones de amor a la Patria. Los desfiles se han convertido en el punto central de esos festejos, predominando los colores rojos blanco y azul en esas celebraciones, al ritmo de los relajados compases de las bandas de música.
Todas las ciudades se visten de fiesta, y como todas las fiestas al estilo panameño, todas son en grande.
Lo curioso es que las mayorías no tienen claro eso que con tanto desenfreno celebramos.
Para estas épocas, algunos pasajes de nuestra historia se han venido repitiendo; la que ha quedado reducida a un cúmulo de anécdotas que corren el peligro de terminar convertidas en verdaderos mitos.
Aunque para muchos el sentimiento patriótico desaparece a zancadas, el mal se acentúa cada año que pasa.
Alzamos el dedo buscando las causas del mal, y señalamos como tal a la educación oficial, la crisis de la familia, el deterioro de la democracia, o en la muerte del espíritu cívico.
Poco importa este asunto, pues interesa –y mucho– sus efectos. No creo que Panamá se mantenga como territorio libre, soberano e independiente, sin conocer a profundidad de nuestros antecedentes y sin sentirnos dueños y custodios de ese legado.
Si los panameños no están posesos de ese sentimiento de pertenencia, Panamá pertenecerá a todo aquel que se proponga poseernos. Cada día presenciamos desfiles en los que desconocemos que se le rinde culto al nacimiento de un Estado disponible para saciar la codicia y la ambición de los corsarios y piratas de la época, y no un país para el beneficio de los panameños.
O asumimos el compromiso de aprender a querer las ‘… tantas cosas buenas…' que forman la Patria o sin saberlo terminaremos dando muestras ante el mundo de que este país es de quien se atreve a tomárselo.
Un país se hace grande si su historia destaca las grandezas de todos sus pobladores y no reverencia el aporte a conveniencia de unos cuantos por su libertad.
Si esas gestas solo inspiran un desfile, entonces pronto seremos dominados.
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Para estas épocas, algunos pasajes de nuestra historia se han venido repitiendo, la que ha quedado reducida...