El periodismo deportivo se ha convertido en “show mediático y/o opinólogos” donde es más importante los like que te den, que la calidad del contenido que generes. Así lo califican varios periodistas especialistas en este género informativo, que lo denominan “periodismo 2.0”, que carece de toda rigurosidad investigativa, data, background, sin contrastar las fuentes e incluso, se toman informaciones de otros, como si fueran propias.
La gran pregunta sería ¿qué ha pasado en el tiempo?, si antes esta situación no se veía con tanta periodicidad. Quizás, tratando de encontrar una respuesta, puedo colegir que las redes sociales han contribuido a esa irresponsabilidad y poco importa de algunos jóvenes comentaristas deportivos, que, con el afán de salir a la palestra, no les importa con su nombre y la credibilidad.
Recientemente, la selección de fútbol de Panamá se enfrentó en las eliminatorias para el Mundial del 2026, con su homóloga de Belice; hubo dos personas que trabajan en medios de comunicación, vaticinaron que “la roja” ganaría por marcador de 14 a 0 y 10 a 0. El partido quedó 2x0; uno de estos mismos, en el encuentro con Nicaragua, sostuvo que Panamá debía encajarles 7 goles, resultado 3x0. ¿Cómo presentarse ante los televidentes al día siguiente, conqué cara?. Por otro lado, es unal falta de respeto y menosprecio hacia los otros equipos, porque todos se preparan para competir.
Los directores de esos programas deben tomar los correctivos posibles y evitar a toda costa, que se siga manteniendo esta mala práctica, que pareciera, vino para quedarse.
