Panamá…!Te luciste con la JMJ!

Antes de la inauguración de la JMJ, circularon rumores de caos vehicular, exposición colectiva a enfermedades, desabastecimiento de alimentos, que tensarían nuestro estado de ánimo. Llegó el Papa, la JMJ empezó a desarrollarse, y sin darnos cuenta, los panameños exhibimos ante nuestros ilustres huéspedes, una versión mejorada de esa nobleza mestiza muy propia de los panameños, sea el católico que le abrió sus puertas a los peregrinos, hasta muchos que no comulgan con esa fe.

Sin lugar a dudas, extrañaremos la presencia de esos grupos de entusiastas caminantes, que con la felicidad en el rostro, recorrían nuestras calles, luciendo orgullosos las banderas de sus países de origen. Echaremos de menos la imagen serena del Papa Francisco cuyos mensajes ‘precisos y concisos' entraron en la consciencia de los panameños, donde se alojarán de manera definitiva.

Estamos convencidos de que Panamá, no será el mismo. No creemos que ahora correremos a convertirnos en católicos. El redescubrimiento colectivo del placer que se siente con ser respetuosos, corteses, solidarios; en fin ese disfrute íntimo que sólo lo puede provocar el actuar y el sentirnos que somos seres humanos.

No necesitaremos una campaña publicitaria que hable bien de Panamá en el extranjero. Los testimonios que de nosotros referirán esos miles de jóvenes en sus países, nos convertirán en un forzoso destino turístico, para el que busca ‘salsa y rumba', como para el que persigue un poco de tranquilidad y paz interior. A partir de hoy, el mundo conocerá que la esencia de la panameñidad, no está comprometida en ninguna ‘lista negra', ni en esos escándalos internacionales que ‘hablan mal de ti y de mí'.

En una semana hemos rescatado nuestra vocación histórica universalista, esa que está divorciada con los intereses y conveniencias del poder, pero que sí está hermanada con el amor y la paz entre los pueblos. Definitivamente los panameños nos lucimos ante tan prestigiosos visitantes. Toca ahora luchar por que la ‘vibra' renovadora del Papa Francisco, acompañe a todos los panameños a atreverse a cumplir con el compromiso de construir una sociedad más justa y solidaria, digna de ser habitada por hombres y mujeres de bien.

Abogado