Ocho horas laborables darias es un período importante en la vida de una persona. De ahí la frase «estamos más tiempo en el trabajo que en nuestros hogares». Lo ideal es que se viva de la forma más positiva posible. Sin embargo, no siempre es así.
El acoso laboral o mobbing es un fenómeno de violencia psicológica y hostigamiento en el lugar de trabajo en el que se afecta la salud mental y la dignidad de las personas.
El termino mobbing tiene sus raíces en la etiología, que es el estudio del comportamiento animal. El etólogo austriaco Konrad Lorenz fue el primero en usar el término con relación al comportamiento animal de un grupo de animales pequeños que ataca a un animal grande como mecanismo de defensa.
Este término fue adaptado al ámbito laboral por el psicólogo sueco Heinz Leymann, quien lo definió como acoso psicológico en el trabajo mediante una serie de actos encadenados y sistemáticos contra un trabajador con el objetivo de lograr su aislamiento o salida de su organización.
El mobbing tiene varias características: la reiteración de los actos, la intencionalidad de hacer daño, la vulnerabilidad de los derechos de la víctima. Y puede ser descendente ─de jefe a subalterno─ o ascendente ─de subordinados a superior─ o entre compañeros del mismo rango.
En nuestra legislación está la ley 7 de 2018, que tiene el fin de prohibir el hostigamiento, el acoso ─sexual y moral─, el racismo y el sexismo en el ámbito laboral, entre otros comportamientos.
Las reformas de 2021 de esta ley amplían su campo a la protección ante cualquier conducta que afecte la dignidad humana.