Muchos estudiantes de centros educativos en Panamá han dejado huellas históricas que han pisado el acelerador para lograr anheladas conquistas en beneficio del país. ‘Los Tomasitos' también tenemos nuestra, y escrita en piedra.
Me corresponde y con la venia de los ‘tomasitos' que juraron bandera y respetando el simbólico lema; ‘honor, ciencia, disciplina... Panamá Primero' es así que pretendo dejar sentado en el presente escrito las aspiraciones que hoy por hoy un considerable número de egresados del Instituto Tomás Herrera que ya tienen en sus manos diplomas de profesionales y amplitud de experiencias han sostenido reuniones para dar un soplo de renacimiento a lo que constituyó el Alma Mater en el futuro de estos ‘tomasitos'.
El Instituto fue creado en 1974 con principios definidos de forjar hombres con disciplina y valores morales.
El juramento a la bandera, unido a la firmeza de lograr mayores conquistas para el país, eran las materias obligadas que debían quedar sembradas en el corazón y mente de los ‘tomasitos'.
Debo confesar que la actual formación de nuestra juventud no es la mejor y en nuestras reuniones hemos estudiado a profundidad las causas de este desmejoramiento y llegado a concluir que se debe a la débil y tímida falta de disciplina en las escuelas.
Actualmente, emprendedores ‘Tomasitos' estamos empeñados en un proyecto para un Plan Maestro con propuestas innovadoras enfocados en jóvenes con bajas posibilidades de educarse y medir sus capacidades intelectuales. En esa ruta nuestra visión, misión y legado tiene un solo fin y es forjar mejores generaciones que contribuyan al engrandecimientos de Panamá.
Abogado
