Mes de la mujer

Marzo, es el mes de la mujer y durante todo el mes se realizan actividades que resaltan los aportes de las mujeres en el desarrollo social, político y económico del país, también se visibilizan los avances y logros. Además, se abordan los desafíos que tenemos que enfrentar. Es valioso que tengamos todo un mes para ello, porque permite hacer justo reconocimiento a quienes abrieron caminos, sin embargo, es indispensable ser conscientes de que lo logrado hasta hoy está en peligro de ser perdido, porque no siempre lo que se nos presenta como avances lo son y lo que no avanza representa retroceso.

En mi opinión las mujeres tenemos responsabilidad en los avances, así como, en los retrocesos, porque nos negamos a aprender a desaprender, para erradicar aquellas prácticas mezquinas y excluyentes como lo son el abrogarse la potestad de abordar los temas de mujeres y hacerlo en espacios controlados. Los liderazgos en la  actualidad no se practican de la misma manera que en el siglo pasado, las mujeres tenemos nuestras particularidades y a las nuevas generaciones les corresponde ser irruptoras, para abrirse paso saben construir espacios para visibilizar sus demandas sociales, no se someten al mismo “librito” que sus antecesoras y esto no solo se debe aceptar, también se debe respetar.

En el marco del Día Internacional de la Mujer tenemos que reflexionar sobre la necesidad de construir unidad real basada en las coincidencias y ser sororas,  establecer alianzas estratégicas y defender los derechos humanos de las mujeres sin discriminar quién es la víctima y quién es el victimario. Sí, sororas como dice una joven política del Frente de Mujeres de Partidos Políticos de Costa Rica, Hansell Francinie Vargas: “La sororidad no es para nosotras, es con las demás”.

Celebren y conmemoren el mes de la mujer y el Día Internacional de la Mujer, como un legado que tenemos la obligación de conservar y el desafío de lo que aún falta por lograr.

Ciudadana