- lunes 03 de marzo de 2025 - 12:00 AM
La política internacional de la mentira, del rofeo a la intimidación
Las escenas que registraron los medios informativos y las redes sociales de la visita del presidente ucraniano Volodímir Oleksándrovich Zelenski, elevó el nivel de asombro de la comunidad internacional al ver el trato al que fue sometido.
El lenguaje corporal del presidente Norteamérica y su vicepresidente haciendo amenazas al jefe de gobierno invitado a la Casa Blanca, fue un verdadero desastre donde la diplomacia fue lo único que no se vio en dicha reunión.
Desde la forma de vestir cuestionada por el equipo de gobierno de menor jerarquía en la oficina Oval y el tono de voz alto inquisidor que sufrió el invitado quedan para la historia.
El hecho de aplicar este tipo de medidas que buscan desacreditar y ridiculizar a un mandatario ante la comunidad internacional, deja un mal sabor de boca a los otros gobernantes del mundo que se ven en el mismo espejo con lo que vivió el presidente Zelenski, frente a un presidente que se cree Dios.
Recordemos que desde el mes de enero de 2025 en que Donald Trump asume la presidencia de los Estados Unidos de América, apuntó hacia ciertos lugares del planeta Canadá, México, Panamá, Groenlandia y ahora Ucrania, con el fin de arrodillar a esos gobiernos para sacar provecho de ellos.
Al no recibir la respuesta esperada por esos gobiernos, Trump desencadeno una serie de medidas que son consideradas como castigos, tales como el incremento en los aranceles de importación de los productos elaborados en esos países, al igual que las deportaciones de sus nacionales que residan en territorio norteamericano.
La política de la humillación, del rofeo y de la mentira quiso ser aplicada al presidente de Ucrania, quien luego de su salida de la Casa Blanca recibió en las redes sociales la muestra de respaldo de miles de personas al igual que de los demás jefes de gobierno de Europa y del mismo pueblo ucraniano.
Es lamentable ver como la diplomacia se ha perdido con el paso de los años, y la extorsión y las amenazas predominan en los países grandes sobre los países pequeños, evidenciando que desconocen los tratados y las normas constitucionales de cada país que los hace soberano.