Juegos tradicionales en el olvido

La humanidad cada día vive más sumergida en la era digital, quedando involucrados en todos los sentidos, todas las edades, con el uso de las tecnologías modernas. Cada vez más, son el desarrollo de los juegos cibernéticos, y así mismos crecen las nuevas conductas y comportamientos de niños y jóvenes, alejándolos de la vida social.

En nuestra infancia, los padres regañaban a sus hijos por jugar con canicas, jacks, barajas o incluso juegos como “la cuerda”, “el escondite chino” “la rayuela” “la soga” entre muchos otros, que poco a poco, han ido quedando en el olvido. Ahora vemos a una generación impregnada con teléfonos inteligentes y computadoras, donde me  ha tocado observar algunos padres utilizar la tecnología para entretener a sus hijos, mala acostumbrándolos, ya que se introducen en el espacio digital y se crea una rutina constante, que luego es un verdadero lío sacarlos; incluso niños pequeños se disgustan o hacen un berrinche por quitarles los teléfonos o tablets.

En este periodo de tiempo, algunos juegos tradicionales que utilizábamos de niño, hace décadas atrás, como: el trompo, que era un  juguete de madera con púa de metal y desde esta punta se enrolla una cuerda y después de ser lanzado con fuerza, giraba y se intentaba mantener el trompo girando en un círculo definido mientras otros lanzan sus trompos e intentan golpear al contrario y empujarlo fuera del círculo.

Ya ni siquiera se juega al trompo, ni a las canicas o cristales como se le llamaban, todo quedó atrás, cada vez se fueron sustituyendo. Incluso hubo una época en donde los niños y adolescentes se reunían a jugar tazos de Pokemón, barajas de Yugi-oh,  puesto quemado, pero ahora todos son juegos de acción  desde el celular o computadora. Esta generación probablemente, nunca sabrá, lo divertido que eran estos juegos tradicionales.

Periodista