La indigencia, un problema social que crece en Panamá

La pandemia trajo consigo un aumento sin precedentes en los niveles de pobreza del mundo. Nuestro país no escapa a esa realidad y la marcada desigualdad social, la falta de empleo y la falta de recursos económicos mínimos; se han convertido en grandes detonantes de la mendicidad y/o indigencia que vemos a diario en nuestras calles.

El aumento de personas viviendo de la mendicidad, es alarmante. Actualmente, no es extraño ver a madres con sus hijos en paradas o puentes elevados pidiendo comida o dinero. Mientras que por otro lado, la adicción a las drogas, el alcohol y otros vicios, ha llevado a hombres y mujeres; sobre todo jóvenes, a sumergirse en el olvido, la soledad y la indiferencia.

Ante esta realidad creciente en nuestro país, surge la interrogante, ¿quién o quiénes son los responsables de atender este problema social? Sin duda, la primera cara a responder es el gobierno local, en este caso los municipios.

Según cifras del Municipio de Panamá más de 500 personas viven en la calle, sin hogar ni comida. Muchos de ellos con enfermedades mentales o adicciones que los lleva a ser más violentos; siendo Santa Ana, San Felipe, Calidonia y Curundú los corregimientos de mayor incidencia.

A todos nos atañe la búsqueda de una solución a este flagelo, menos indiferencia y más apoyo del gobierno central a las diferentes ONGs que brindan atención a estas personas. Ayudaría a no solo darles techo y comida, sino también tratamiento a su salud, adicciones, delincuencia.

PERIODISTA Y ABOGADO