• jueves 06 de julio de 2023 - 12:00 AM

Firmar un tratado contra la voluntad popular es traicionar la Patria

Si el primero era una lesión al corazón de la Patria, el actual entrega territorio nacional como enclave

“Cuando los pueblos desconocen su historia, tienden a repetirla”. Los fracasos pueden ser mayores a los anteriores. Algo así sucede en Panamá. Muchos por clientelismo más que por desconocimiento. Ello impide avanzar y mantienen a sus hijos y parientes secuestrados en la pobreza.

Observamos en cada periodo electoral promesas de candidatos. Promesas que generalmente no cumplen. Por ejemplo, el presidente Cortizo Cohen prometió: un Centro Único para la compra de medicamentos, para evitar el desabastecimiento. Su logro: un Director de la Caja de Seguro Social que asegura existencia de medicamentos, pero en la práctica el público reclama, “no hay”.

Decía el presidente Cortizo Cohen que implementaría farmacias populares, asumimos que similares a las que instituyó Omar Torrijos. Estamos en espera.

Dijo que construiría el Centro Oncológico en David, a la fecha no ha podido resolver el problema de ubicación del Instituto Oncológico Nacional (ION) y sacar la Corte Suprema y el Ministerio de Salud de los edificios que correspondían al Hospital Gorgas, en el cual funciona el ION o en su defecto construirlo donde está actualmente la Cárcel de Mujeres.

Aún está en espera la construcción de la facultad de enfermería y medicina que prometió, pero en poco acaba su periodo.

El gobierno estuvo distrayéndonos con la pandemia (COVID), mientras aumentaba la deuda pública y ahora, empiezan con la amenaza de otro posible virus, nos imponen el terror.

Por otra parte: ¿Qué razón motiva que el gobierno pretenda comparar el leonino contrato que firmó el gobierno del entonces presidente Ernesto Pérez (1997), con el actual mamotreto, apátrida y con mayores desventajas, mismo  que promueve el Señor Presidente Laurentino Cortizo y su Gabinete?

Si el primero era una lesión al corazón de la Patria, el actual entrega territorio nacional como enclave, incluyendo el espacio aéreo y uso del mar. Eso es violar la soberanía que tanto nos costó rescatar mediante el Tratado Torrijos/Carter. Firmar un tratado contra la voluntad popular es traicionar la Patria. ¿Para cuándo un REFERENDUM? Dios te salve, Panamá.

Ciudadano humanista y patriota.

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