Efectos de la desnutrición

En Panamá se vienen desarrollando grandes megaproyectos urbanísticos y el más importante, la ampliación del Canal, lo que pareciera que en nuestro país todo va bien, incluso, lideramos la región latinoamericana con el más alto crecimiento económico, lo que para el país es motivo de orgullo. Sin embargo, sería muy justo y solidario que miremos el sector marginado, donde la pobreza alcanza el 37% a nivel nacional, allí donde el hambre se oculta, afectando al 19% de los niños menores de 5 años; mientras que en áreas urbanas es del 4%. Pero en los sectores indígenas, de cada 100 niños 57 tienen bajo peso, por la falta de acceso a los alimentos.

Según el estudio ‘El costo del hambre: impacto social y económico’, elaborado por la Comisión Económica para América Latina y el Programa Mundial de Alimentos, la desnutrición infantil le cuesta al Estado panameño aproximadamente B/322 millones, lo que representa el 3% del producto interno bruto (PIB).

Es de suma importancia mencionar que las mujeres en estado de embarazo y lactantes, al no contar con una adecuada nutrición de alimentos ricos en vitamina A, hierro, calcio y zinc, pudieran afectar el desarrollo del cerebro del neonato, ya que este se forma en 80% en los primeros 18 meses de vida, por lo que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), ‘la desnutrición es la falta de alimentos o la insuficiente cantidad de calorías, nutrientes, vitaminas y minerales necesarios para mantener un óptimo estado de salud acorde a la edad.

Debemos agregar que este fenómeno cruel ocurre porque las familias panameñas no cuentan con los recursos necesarios para adquirir el alto costo de la canasta básica familiar y un plan de nutrición adecuada, y así minimizar los altos índices de desnutrición y las deficiencias de aprendizajes.

* Docente y voluntaria de los derechos humanos