¿Corrupción o prudencia?

Sobre el tema de extinción de dominio, mucho se agitaron las aguas en pro y en contra, en un tema al que muchos ciudadanos ni importancia le tomaron, pues al no tener fincas o hectáreas adquiridas a centavos, ni de la noche a la mañana pasaron de vender huevos y se hicieron ricos empresarios o cosas así. Al pueblo este tema le pasa desapercibido.

El primer gran error de los defensores de dicho proyecto, es no haber demostrado credibilidad con sólidas acciones en el combate de la delincuencia. ¡Solo agarran cazadores de iguana y robagallinas y con dificultad! Pues para lo del fentanilo, ventiladores en pandemia, cargamentos de medicinas y muchas otras cosas, acaban culpando al más pendejo y no agarran a ningún cocotudo.

El segundo error fue pretender demeritar valiosas voces honestas como el prof. Miguel A. Bernal y otros juristas, que claramente vieron la vulneraciones constitucionales, en dicho proyecto y que lejos de ser utilizado para perseguir el delito, parecía una forma de persecución de los enemigos políticos.

Si ya con las leyes y jueces actuales se dan cautelas, secuestros y aprehensión de bienes, ¿por qué dar esta ley si no garantiza devolución si es inocente? Venganzas políticas sube uno y baja otro y no se parará nunca.

Mientras no exista la independencia y carrera judicial real, nada funcionará. Mientras tengamos jueces extorsionables o corrompibles, seguiremos lejos de una verdadera justicia.

Darle una ley al mismo juez corrupto que liberaba delincuentes, solo serviría para perseguir a los que se le opongan al poder. Primero arreglen la justicia, luego refuercen medidas para que un juez honesto e independiente no le tiemble la mano hacer justicia.

MÉDICO