Color café, un libro contra la discriminación y la violencia

La discriminación es un mal que todavía existe en el mundo actual. Y esto pasa a pesar de leyes, de las acciones de asociaciones, de entidades oficiales y de personajes que luchan contra ella. Ataca y muerde a millones de seres a lo largo y ancho del planeta. Deja cicatrices y destruye vidas.

Algunos dicen que es una actitud muy propia de la humanidad. Que se rechaza lo diferente y lo que no se conoce. La discriminación racial o la violencia contra la mujer son de las principales manifestaciones que dejan hondas heridas sociales.

Kayra Harding, mujer, escritora, activista, diputada de la República de Panamá ha llevado a cabo una cruzada contra estos males y observando sus actuaciones se puede mencionar que escribir este libro fue uno de sus primeros pasos.

Kayra, que trabajó muchos años de periodista tomó la pluma para escribir su primera obra, Color Café, ¿Discriminación o Racismo? En ella de una forma directa y valiente enuncia el problema.

Lo identifica desde sus orígenes en las distintas civilizaciones, sobre todo las occidentales. En la entrevista para este artículo repasamos algunas de sus definiciones y hay una que dice: “La discriminación es el trato diferente y perjudicial que se da a una persona por motivos de raza, sexo, ideas políticas. La discriminación ataca el corazón mismo de lo que significa ser humano. Discriminar es dañar los derechos de alguien simplemente por ser quien es o por creer en lo que cree. La discriminación es nociva y perpetúa la desigualdad”.

Después de esto leemos conceptos. “Todas las expresiones de discriminación, vinculan la maldad con el color negro”. Y a esto le suma hábilmente el relato de anécdotas propias que se dan dentro de propias familias negras en las que hay sentimientos discriminatorios. Algunas son insólitas pero muy comunes.

Como cuando su abuela darienita no deja que su abuelo antillano le hable en inglés o cuando pega el grito al cielo cuando le anuncia que tiene un novio negro.

Hay otra situación que menciona a una prima de piel clara producto de ser hija de una madre negra y un papá blanco, que no se percataba después de cuarenta años de vida que ellas es negra. Cuando eso pasa declara con entusiasmo “ Desde hoy soy afrodescendiente”.

O cuando menciona un detalle lapidario que oyó decir a alguien. “ El peor enemigo del negro es el chocolate” O sea un negro de piel más clara discrimina a otro de color más oscura que la suya. En su libro determina que para estudiar el problema, se debe entender el porqué de esta discriminación, que en pleno S XXI es más peligrosa que ayer.

En su contraportada señala: “No es un libro para negros, es para todas las razas y culturas, para los negros esperamos se identifiquen, para los amarillos que también son discriminados y sobre todo para los blancos a quienes queremos”.

Nos dice la escritora que después de publicarlo tuvo un gran impacto internacional. Es entonces que se interna en el duro camino del activismo y crea acciones para destacar que los negros tienen muchas cosas de que estar orgullosos.

Escritor