- jueves 08 de abril de 2021 - 12:00 AM
Cartas a Mama Juana
Hace una treintena de años inicié mis escritos, como mecanismo de protesta y orientación social, contra medidas impopulares de los gobiernos, procurando alertar y crear conciencia, con mayor efectividad.
Como bebé, rasguñando la tierra empezando a caminar, torpemente publiqué mis artículos en el diario ‘El Universal', hoy desaparecido. Incursioné en casi todos los diarios panameños, logrando siempre, con bendición divina, acogida a mis escritos.
A mediados de la década surge la proclama ‘Dios te salve, Panamá', en cada uno de mis escritos, así como la fábula ‘Cartas a Mama Juana' apegada a la realidad.
Por invitación personal de Aris De Icaza, dueño de La Gran Cadena Exitosa, inicié el segmento ‘Te digo la Verdad' y posteriormente nos ofrece un programa radial diario, que denominamos ‘Oasis de Opinión', el cual desde entonces produzco y dirijo con Lizabeta, mi esposa, ya que sin su apoyo hoy fuera historia. Nos acompañaron en su principio los abogados, periodistas y amigos Jorge Mottley y Ramón Castellanos.
Como anécdota, transcribiré algunos párrafos ligeramente editados, mismos que eran publicados los domingos en Anagrama (El Siglo). Comparto el del 12 de marzo de 2006.
‘Mamá Juana: te escribo por encargo de mi tío Pablo Pueblo. Él está preocupado por lo que pueda pasarte. Dice que tú eres una vieja madre joven. Todavía no entiendo que quiere decirme.'
‘Cuando pregunto me dice que nadie sabe cuándo naciste, pero te conquistó el imperio español. Que lo abandonaste porque te explotaba y permitía abusaran de ti; que te uniste al viejo Colombia para protegerte, pero igual te fue de mal y por último te hizo caritas el "fulo del norte", llamado Gringo. Él te cobijó en su lecho y te cubrió con el paraguas del pentágono, porque te entregó un francés, llamado Buneau Varilla.' Continuará…
Este cuento consta de tres personajes. Mama Juana, Pablo Pueblo y el Hijo de Juana. Personajes típicos, críticos de nuestras vivencias que rompen con ilustradas narraciones del malestar nacional. Dios te salve, Panamá.
ECONOMISTA, EDUCADOR, HUMANISTA.