- jueves 19 de mayo de 2022 - 12:00 AM
En busca del tesoro
Los panameños somos una población alegre, acogedora y jovial. Así nos describen muchas personas de otros países al visitarnos o tener contacto con nosotros.
El optimismo es una virtud que tienen aquellas personas que se levantan ante las adversidades y está presente en la forma de ser del panameño. Sin embargo, este estado de ánimo ha mermado en los últimos años y es un fenómeno que ocurre a nivel mundial. La agencia IPSO ha concluido que la percepción de la felicidad de nuestros nacionales está por debajo del promedio global y del de la región. ¿Existirá insatisfacción por las necesidades no satisfechas?
Esto nos lleva a preguntarnos qué entendemos por ser felices, dónde buscamos la felicidad y si los conceptos de alegría y de felicidad son lo mismo.
La RAE define la felicidad como «Estado de grata satisfacción espiritual y física».
Pensadores como Platón, Nietzsche y Kant coinciden en que la felicidad la encontramos dentro y no fuera de nosotros mismos.
La psicopedagoga Natalia Calderón nos dice «La alegría es una emoción, pasajera, fugaz tal cual las otras emociones, no obstante, la felicidad es un trabajo personal que está ligado a una autoestima sana y se desarrolla a lo largo de la vida».
El concepto de felicidad varía de persona a persona y depende de dónde busquemos o encontremos ese tesoro personal. Puede que la encontremos al vencer obstáculos que nos oprimen, como dice Nietzsche. Puede que esté en la satisfacción de nuestras necesidades personales (económicas, afectivas, laborales). Puede estar en vivir la vida de una forma plena y serena, y puede no estar necesariamente relacionada con ausencias de problemas y asuntos por resolver.
Abogada, mediadora, coach