El estilo de combate enredado de los padres de la patria tiene enardecida a la afición que el 5 de mayo de 2024 les dio la derecha. El tan anhelado cambio que se buscaba no se le logró y, por ello, en el 2029 se espera que varios de los que hoy están en la cima caigan a lo más bajo del ‘ranking’ politiquero.

El pulseo por la conformación de las comisiones tiene molesto a Pablo pueblo, que no entiende estas estrategias si lo que se esperaba eran consensos por el bienestar de todos los que nos agitamos en esta tierrita. Estamos golpeados por la crisis del chenchén que amenaza con enviarnos a la fría lona.

Es pobre el espectáculo que se está viendo en este polémico escenario, donde en el pasado se libraron grandes combates. Ni los que dicen combatir para los independientes están dando la talla, se han contagiado de las mañas de algunos veteranos.

Por otro lado, la campeona del populoso debe tratar de trabajar a toda máquina, porque la fanaticada se está cansado de las promesas incumplidas. En campaña parecía tener la fórmula para vencer por nocaut a los problemas sociales; una vez recibió el fajín el rendimiento no ha sido el óptimo.

La mandamás de la división que te educa tampoco las tiene todas consigo.