• miércoles 24 de mayo de 2023 - 12:00 AM

El absurdo de los medicamentos

El alto costo de los medicamentos en nuestro país no es nada nuevo y los pocos intentos que han realizado para controlarlos terminan maniatados po...

El alto costo de los medicamentos en nuestro país no es nada nuevo y los pocos intentos que han realizado para controlarlos terminan maniatados por los grupos del cartel de las 4 o 5 familias que manejan el oligopolio de las medicinas en Panamá quienes a partir de los entuertos que hacen en la Asamblea Nacional, logran que al momento de la implementación vía decretos mantener sus lucrativas ganancias sin importar cuento muerto dejen en el camino.

Y precisamente, eso es lo que hicieron con la ley uno de medicamentos, mejor conocida como ley Balbina, quien desde los estrados de la Asamblea siendo diputado intentó poner un freno a los mismos y a la postre hemos terminado igual o peor, valga decir que las quejas constante de la población que desde antes de las revueltas de junio y julio del año pasado el gobierNito se comprometió con resolver el problema lo cual terminó en una mesa de ‘diálogo' donde la voz cantante y responsabilidad gubernamental la llevaba el hoy vicepresidente y precandidato a presidente por el partido gobernante conjuntamente con los empresarios de las farmacias (el zorro cuidando gallinero) los cuales terminaron en más de los mismo y el pobre pueblo jodido, jodido.

No sé hasta cuando nuestros gobernantes entenderán que el estado no puede ceder su papel de brazo fuerte cuando se trata de proteger los mejores intereses de sus ciudadanos y cuando de salud se trata mucho peor, no estamos hablando de cosa de poca monta, la expoliación que los magnates de la medicina le hacen a nuestro pueblo es infernal, y les representan cientos de miles de millones de ganancias anuales, para muestra un botón. Un frasquito de perindopril o coversyl (medicamento para la presión arterial de 30 tabletitas 0.5) en Panamá en el lugar donde lo encuentras más barato te cuesta $ 32.40 con y esa misma cajita en Colombia cuesta $ 3.90 qué clase de robo es éste; permitido y apadrinado olímpicamente por el estado y así es con todo.

Se acercan las elecciones generales y la patria requiere que sus mejores hombres lleguen a los distintos cargos a elegir, para ello es necesario que los votantes quienes somos los primeros responsables tengamos la capacidad y conciencia necesario para escoger los mejores y dejar de vender tanto el voto cómo la conciencia porque quien vende su voto pierde el derecho de reclamar y quien compra un voto sabe de antemano que lo que busca es robar para recuperar la inversión.

FUNDADOR Y EXSECRETARIO GENERAL DE LA CGTP