Al menos cinco muertos en un atentando de Al Shabab en un hotel de Mogadiscio

El político opositor Farhan Nur, que se encontraba entre los rescatados
  • domingo 31 de enero de 2021 - 5:37 PM

Cinco atacantes cometieron hoy un atentado suicida en el hotel Afrik en la capital de Somalia, Mogadiscio, donde se celebraba una conferencia política de la oposición, y causaron al menos cinco muertos y siete heridos en un ataque que reivindicó el grupo yihadista Al Shabab, según confirmaron a Efe fuentes policiales.

"Los guardias de seguridad del hotel ayudaron a rescatar más personas", aseguró a Efe el agente de policía Ali Ahmed Tubey, que participó en la operación.

El político opositor Farhan Nur, que se encontraba entre los rescatados, declaró a Efe que "el enemigo planeó el ataque para eliminarnos".

El atentado comenzó con la explosión de un coche bomba cerca del hotel y un puesto de control, tras lo cual cinco atacantes entraron en el establecimiento, donde abrieron fuego y lanzaron granadas contra las fuerzas de seguridad antes de hacerse explotar todos ellos.

En el momento del ataque, el hotel, ubicado en la transitada carretera que conduce al aeropuerto internacional de Mogadiscio, se encontraba en plena celebración de un conferencia política donde candidatos de la oposición debían discutir sobre las próximas elecciones generales que deberían celebrarse este 8 de febrero.

Durante el enfrentamiento, que duró unas cinco horas, la mayoría de los ocupantes del hotel fueron rescatados, entre ellos algunos altos cargos de las fuerzas de seguridad somalís, a pesar de que al menos cinco civiles perdieron la vida, cifra que podría aumentar.

La capital de esta nación del cuerno de África y, en concreto, sus hoteles sufren a menudo ataques de la organización terrorista Al Shabab, afiliada a Al Qaeda desde 2012 y que controla las áreas rurales del centro y sur de Somalia, país en el que busca instaurar un Estado islámico de corte wahabí (ultraconservador).

Somalia vive en un estado de guerra y caos desde 1991, cuando fue derrocado el dictador Mohamed Siad Barre, lo que dejó al país sin Gobierno efectivo y en manos de milicias islamistas y señores de la guerra.