Abuelos que sufrieron daños oculares durante un eclipse solar dan advertencia
- lunes 21 de agosto de 2017 - 9:54 AM
En 1962, Lou Tomososki, de 16 años de edad, se detuvo a mirar el eclipse parcial que ocurría en el cielo. Mientras sólo miraba con los ojos desnudos durante unos segundos, el daño que el sol causó a la visión del ahora adulto mayor permanecería con él durante el resto de su vida.
Tomososki comenzó a ver destellos en su visión, similar a los puntos que se producen cuando se toma una foto con un flash. El ahora señor de 70 años ha experimentado problemas de visión desde entonces, y está advirtiendo a aquellos que quieren disfrutar del 'Gran Eclipse del Siglo' sobre la importancia de usar protección ocular mientras miran el evento celestial.
" Va a ser muy rápido y no vale la pena arriesgarse" , dijo Lou Tomososki a medios internacionales como KGW, People y Univisión.
Tomososki se enteró de que había quemado la retina en su ojo derecho durante el eclipse, dándole un punto ciego parcial en su centro. Su visión nunca mejoró.
" ¿Sabes cómo la gente de noticias borra una placa de matrícula? Eso es lo que tengo en el ojo derecho, del tamaño de un guisante, no puedo ver eso" , puntualizó.
Tomososki dijo que deseaba que otros presten atención a su advertencia de usar protección ocular durante el próximo eclipse. "Millones de personas por ahí van a estar mirando hacia fuera ... ¿Cuántos de ellos van a decir: Algo le pasó a mis ojos? ", manifestó.
Todos los días hay que tener cuidado
Los médicos dicen que incluso si el sol está obstruido sus rayos todavía pueden causar daño al ojo.
El médico G. Baker Hubbard, especialista de Atlanta, expresó que cuando se obscurece parcialmente el sol con la luna, no es tan brillante, y no es tan doloroso verlo, pero, a pesar de ello, esos rayos dañinos quedan en los ojos y se enfocan directamente hacia el centro de tu retina, y ahí es donde hace el daño.
Aquí hay más razones para que no mires el eclipse
Otro testimonio, es el de Bill Hanlon, un hombre de 78 años. Cuando tenía 13 años, vivía en Alemania, y el 25 de febrero de 1952 paró junto con sus otros compañeros de clase a ver el eclipse total de sol que se vería en Europa y parte de Asia.
Sin ninguna protección, (en el año 1952 la popularidad de los lentes para ver eclipses era nula), Bill miró el sol que se ocultaba tras la luna de manera sostenida. “Como resultado yo solo tengo el 10 por ciento de mi visión, la luz quemó el centro de mis dos ojos”, confesó a diarios locales.
“Puedo ver siluetas y colores pero todo lo demás se fue. No puedo ver la cara de la gente, no puedo manejar ”, lamentó.
El Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc) informó que si el clima lo permite, Panamá disfrutará del fenómeno majestuoso, que vale la pena no perderse pero que solo se podrá observar de manera segura con lentes avalados para este propósito. A quienes más habrá que cuidar será a los más jóvenes que parece pasar inadvertidos de toda recomendación: Louis Tomososki y Bill Hanlon eran unos chiquillos cuando se atrevieron a mirar sin protección el eclipse.