Japón extiende su ayuda a los damnificados por el huracán Melissa

La solidaridad no entiende de distancias. Este sábado, el gobierno de Japón hizo llegar a Cuba una donación de emergencia destinada a las comunidades más afectadas por el huracán Melissa, un fenómeno que dejó tras de sí lluvias intensas, deslaves y severos daños materiales, especialmente en la región oriental del país.

El donativo, coordinado por la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA), incluye purificadores de agua, mantas, tiendas de campaña y colchonetas, artículos que representan alivio inmediato para cientos de familias que hoy tratan de reconstruir sus vidas entre los escombros.

Durante la entrega oficial, realizada en el aeropuerto internacional José Martí, el embajador japonés Kazuhito Nakamura expresó su profunda preocupación por los estragos del huracán y la crecida del río Cauto. “Nos impresionó la magnitud del impacto y la resiliencia del pueblo cubano. Japón ha estado siempre al lado de Cuba en momentos de desastre, y hoy reafirmamos nuestro compromiso con su recuperación”, aseguró.

Tatsuya Ashida, representante de JICA en Cuba, destacó que la ayuda no solo busca cubrir necesidades urgentes, sino también fortalecer la cooperación a largo plazo. “Japón se une a Cuba con espíritu de amistad y cooperación, reafirmando nuestro compromiso con el bienestar de los afectados”, señaló.

En nombre del gobierno cubano, la viceministra de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, Deborah Rivas, agradeció la rápida respuesta del país asiático. “Esta ayuda llega en el momento justo y será distribuida de inmediato a las familias más afectadas. Es un gesto que reafirma la amistad profunda entre nuestros pueblos”, expresó.

En medio de la devastación que dejó Melissa, la ayuda japonesa se convierte en algo más que suministros: es un mensaje de esperanza y de unión entre dos pueblos que se tienden la mano cuando más lo necesitan.