- viernes 01 de enero de 2020 - 12:00 AM
Para dejar atrás todo lo malo de este pandémico 2020 y entrar ‘limpios' al próximo año, peruanos fieles a la tradición ancestral del altiplano andino recurren a los baños de florecimiento y revelan sus anhelos para el 2021 en la tradicional ‘Feria de los Deseos'.
Al compás de las campanas que invocan a los ‘apus', los dioses de los Andes, curanderos andinos naturales del sureste del Perú y del este de Bolivia ofrecen cábalas y ritos a los visitantes, que acuden al recinto ferial para limpiar su aura y confesar sus deseos de amor, fortuna, dinero y salud para el año nuevo.
Así sucede en la Plaza Manco Cápac, de Lima, donde alrededor de la escultura del dios de la abundancia, Ekoko, hay decenas de puestos llenos de amuletos y ‘alasitas', el nombre en lengua aimara que reciben las miniaturas hechas de papel o cerámica que materializan los deseos.
Las opciones de miniaturas son vastas e incluyen casas, vehículos, negocios, bebés, billetes, certificados de buena salud, árboles de la felicidad y cóndores para ascender de cargo, entre otros.
Tras ser bendecidos por el sacerdote con agua de flores y papeles amarillos, los adornos deben colocarse ‘en un lugar visible' en la casa del comprador que, ‘con mucha fe', permitirá que ‘la energía entre y el deseo se cumpla'. Así lo aseveró a Efe el sacerdote andino Mario Huanca Mamani, original de Puno.
El ritual más solicitado, sin embargo, es el del florecimiento, un baño seco que, por unos 20 o 30 soles (5,6 o 8,4 dólares), ‘limpia el aura' para tener un próspero 2021. Según detalló a Efe la curandera Elena Saravia, el proceso de ‘limpieza' implica el uso de una pluma de cóndor, un huevo de avestruz y ‘otros secretos' que ‘sacan toda la carga negativa que uno tiene o alguna enfermedad'.
‘Es para florecer nuevamente su corazón, para que pueda pagar las deudas, tener un negocio', después de este ‘mal año que hemos tenido con el virus', explicó la maestra boliviana Victoria Jalgo, mientras arrojaba flores amarillas para la prosperidad.