‘Orange is the new black' se muda para otra cárcel

Luego del motín que las reclusas de la cárcel de mínima seguridad de Litchifield, organizaron tras el asesinato de Poussey
  • viernes 17 de agosto de 2018 - 12:00 AM

Análisis. ‘Orange is the new black' es una de las producciones más importantes de Netflix. Hace una semana pude terminar de ver la sexta temporada de la serie. Y aunque la disfruté mucho, debo reconocer que no fue tan grandiosa como las temporadas anteriores.

Luego del motín que las reclusas de la cárcel de mínima seguridad de Litchifield, organizaron tras el asesinato de Poussey, una de las convictas más queridas, en manos de uno de los oficiales novatos que trabajaba en la prisión, y posterior a la irrupción de SWAT para retomar el control de la penitencaria; el sistema de justicia busca a quién culpar de los hechos ocurridos.

En esta temporada, las reclusas fueron trasladadas a las cárcel de máxima seguridad en donde están las criminales más peligrosas. Las convictas se enfrentan a un terreno desconocido en el que son maltratadas con mayor fuerza por los guardias que las desprecian por el motín que organizaron en la otra cárcel.

La serie nos trae una temporada en el que podremos adentrarnos aún más en el perverso y corrupto mundo de los centros penitenciarios.