Meten a la cárcel provisionalmente a las que atacaron a Liza Hernández

Hubo un forcejeo entre las asaltantes y la modelo para quitarle su pulsera de 15 mil dólares
  • sábado 13 de agosto de 2022 - 7:52 AM

El Tribunal Superior de Apelaciones del Primer Distrito Judicial de Panamá, integrado por los Magistrados Adilio González, Yiles Pitti Atencio y Giovaninna Antinori, confirmó la medida cautelar personal de detención provisional proferida por un Juez de Garantías, a dos ciudadanas imputadas por la supuesta comisión del delito contra el patrimonio económico, en la modalidad de robo agravado, en perjuicio de la modelo Liza Hernández.

Mientras que, a un ciudadano de 21 años, el Tribunal revocó la medida cautelar personal de detención provisional y en su lugar aplicó la medida cautelar personal de reporte periódico una vez a la semana ante el Ministerio Público, la prohibición de salida del país y la prohibición de acercarse a la víctima.

La decisión de los Magistrados del Tribunal Superior de Apelaciones, surge luego de escuchar a las partes intervinientes, valoraron los indicios de vinculación que aún se mantienen en la causa investigada. De igual forma, tomaron en cuenta los riesgos procesales.

En esta audiencia de control de garantías, el Ministerio Público estuvo representado por la fiscal Ofira Agrazal, mientras que la asistencia legal del imputado estuvo a cargo del defensor técnico particular Carlos Iván Guardia.

Este caso ocurrió el 2 de agosto en el corregimiento de San Francisco, en calle 50, provincia de Panamá, cuando se registra una discusión y se da el robo de una pulsera valorada en B/. 15.000 balboas.

La Doradita  fue víctima de un incidente violento. El pasado miércoles, cuando salía de un evento al que asistió, dos mujeres la asaltaron. Personas que se encontraban a su alrededor la auxiliaron, unos evitaron que la agresión pasara a más, mientras otros atraparon a las antisociales.

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Contó que las dos mujeres se le acercaron para tomarse una foto con ella, petición que aceptó, pero mientras entró en confianza, una de las chicas la golpeó, mientras la otra le robó sus pertenencias.

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Liza, según ha contado, la intención era hacerle daño: ‘Fue un hecho premeditado y planeado por una basura humana', dijo al momento de su asalto, y por eso concluyó: ‘Estoy segura que su plan no salió como querían porque hay un Dios justo que todo lo ve'.