Merlí, una fuente de sabiduría, tragedia y amor

Recomendación. Hace exactamente un año tuve una crisis de adicta al Netflix: no encontraba alguna serie o película que me pareciera interesante y que no hubiera visto. Siempre me salía la recomendación de Merlí, pero nunca la consideré porque la descripción no me llamaba la atención. Pero, unos amigos ticos que estaban de visita en Panamá me dijeron que era una genialidad y, ya sabemos que la mejor publicidad es la persona a persona, así que le di una oportunidad a la serie catalana.

Fue una de las mejores decisiones que he tomado. Merlí es en definitiva de las mejores series disponibles en la plataforma. Para contarles un poco, Merlí Bergeron es un profesor de filosofía desempleado que por su situación tiene que irse a vivir al apartamento de su madre, la famosa actriz, Carmina Calduch, y junto a su hijo Bruno con quien no tiene una gran relación.

La relación con Bruno se complica aún más cuando Merlí es contratado en la escuela donde su hijo estudia, la Ángel Guimerá, para impartir las clases de filosofía. La personalidad directa de Merlí, sus métodos de enseñanza poco comunes, sus convicciones y el involucrarse en la vida de sus alumnos, le lleva a ganarse el amor de los estudiantes y el rechazo de algunos docentes.

Las actuaciones, el guión, el humor, las reflexiones y los mensajes son fenomenales. Estoy hablando de una serie que no solo entretiene, sino que también invita a aprender, pensar y reflexionar. Una serie que apuesta a un sistema educativo diferente en que todas las personas podamos respetarnos,