Cuentos compañeros

El cuento del Martes del 28 de enero del 2020
  • martes 28 de enero de 2020 - 12:00 AM

Ya casi me acostumbro a la imagen de una sala de espera llena de personas mirando su teléfono, con el cuello en la misma posición de castigo que usaban algunos maestros de antaño: agache la cabeza y no la levante hasta que le diga. Yo no sé que tiene el celular, que casi nos obliga a bajar la cabeza y por más que el dolor de cuello y espalda nos atormenta, seguimos usando la misma postura para interactuar con ese mundo cibernético, que nos trae cantidades interminables de información y entretenimiento.

Desde hace unos meses volví a llevar un libro ligero en el bolso, como para variar de actividad y disminuir la tensión de mi cuerpo mientras espero en alguna sala o en filas de esas que con sólo verlas, una se cansa. Elegí un libro de cuentos, buscando finales más inmediatos y para eso me llevé el libro ‘La violenta ausencia del color del agua', del escritor costarricense Rolando Durán. Sus cuentos exploran la naturaleza del ser humano en su ángulo oculto, tal vez en lo inconfesable. Cada una de las historias que he leído hasta ahora, cuentan de una pasión oculta, del verdadero móvil de un asesinato o de un secreto que su protagonista cree que nadie sabe. Comienza con un epígrafe de la escritora Clarice Lispector, que habla de los espejos como la posibilidad de ausentarse de sí mismo y entender la profundidad en su ser vacío, de meterse de lleno en su propia imagen para entender que lo que se proyecta está lejos de lo que se es. Si, porque cuando una se mira al espejo a solas, puede ver lo que quiere enseñar y a la vez puede escuchar esos pensamientos que no le dice a nadie, como si fuera una confesión.

Como es mi libro de cuentos compañero, voy de a poco, disfrutando las historias y debatiendo con los personajes, pensando en la vida y comprendiendo mis propios temores. En eso me toca el turno y la espera se hizo nada. Así es un libro compañero, que no te crea tensión muscular, pero te aporta reflexión en medio de tanta espera.

comments powered by Disqus