Se roba el show

El plusmarquista jamaicano Usain Bolt estampó ayer las huellas de sus manos en el estadio de atletismo donde este año se celebrarán los Juegos Panamericanos de Lima 2019.

Bolt, el hombre más rápido del mundo al correr los 100 metros en 9.58 y los 200 metros en 19.19, colocó las palmas de las manos en un bloque de cemento fresco que formará parte del estadio, cuya construcción está por culminar.

También desveló una placa conmemorativa de su paso por este estadio, recientemente remodelado para albergar a unos 5 mil 800 personas, aunque para los Panamericanos es posible su capacidad se incremente en casi el doble con tribunas temporales.

El exatleta fue el primer deportista de talla mundial en pisar el tartán de la Villa Deportiva Nacional (Videna) de Lima, donde está previsto que en los próximos meses se den cita algunos de los candidatos a suceder a Bolt en el trono olímpico de la velocidad.

En la misma ceremonia, Panam Sports le entregó un trofeo en reconocimiento por su destacada trayectoria deportiva.

Bolt estuvo acompañado por el presidente del comité organizador de Lima 2019, Carlos Neuhaus, el alcalde de la capital, Jorge Muñoz, y Milco, la mascota de los próximos Panamericanos, inspirada en el cuchimilco, una figura de cerámica de las antiguas civilizaciones prehispánicas de Perú.