Redescubriendo la intimidad con el poder del erotismo en la cama

  • domingo 16 de febrero de 2025 - 12:00 AM

En un mundo donde las distracciones son constantes, muchas parejas están redescubriendo la importancia del erotismo en su vida sexual. Expertos en relaciones sugieren que el erotismo no solo se trata de la atracción física, sino también de la conexión emocional y la comunicación abierta entre los amantes.

El aspecto erótico de la relación no solo enriquece la vida sexual, sino que también fortalece el vínculo afectivo de la pareja, fomentando la confianza y la complicidad.

¿Por qué tiende a desaparecer? Al principio, todo puede parecer muy rico y divertido, pero en realidad, el erotismo dentro de la pareja estable puede ir perdiéndose por diversas razones, entre ellos: factores hormonales, costumbre, percepciones erróneas y la llegada de los hijos.

¿Y qué podemos hacer? Lo primero es tener en cuenta que el deseo en la pareja no es algo estable, sino más bien algo que va variando como las olas del mar y que además tiende a disminuir o a transformarse con el tiempo.

Ahora bien, trabajar en avivar el deseo no equivale a forzar. Por el contrario, la pareja debe trabajar en sus creencias, en cómo sentirse más deseables, estar más a gusto con sus cuerpos o tener más energía.

En este sentido, acudir a un sexólogo clínico puede ser muy beneficioso, ya que estos profesionales tienen la preparación necesaria para guiar a las parejas que tienen algún problema relacionado con su vida sexual.

Para avivar la pasión y el erotismo es importante que la pareja mantenga una comunicación abierta y honesta sobre deseos y fantasías, lo que puede ayudar a desmitificar tabúes y crear un espacio seguro para la exploración mutua. Fomentar un ambiente de confianza y comunicación permite a las parejas redescubrirse mutuamente, cultivando no solo el deseo, sino también una profunda complicidad.

Asimismo, se hace necesario practicar la autoexploración. A veces tendemos a responsabilizar al otro de nuestro placer, cuando a lo mejor no sabemos ni qué nos gusta. Es importante que cada miembro conozca sus zonas eróticas, que van más allá de los órganos sexuales, así como sus fantasías, para poder guiar y compartirlas con el otro.

Incorporar actividades sensoriales, como masajes mutuos o juegos de rol, puede estimular la conexión física y emocional.

La planificación de citas sorpresa o escapadas románticas y tener detalles, también puede romper la rutina diaria y reavivar el interés. Por último, compartir la lectura de literatura erótica o la visualización de contenido sensual puede abrir nuevas puertas a conversaciones sobre el deseo, fortaleciendo así el vínculo afectivo y sexual en la pareja.