¿Quieres tener orgasmos asegurados? Seguro lo consigues con la mariposa

La posición de La mariposa es una de las posturas más placenteras para la mujer.
  • viernes 15 de noviembre de 2019 - 12:00 AM

La posición de La mariposa es una de las posturas más placenteras para la mujer y con ella puede ser mucho más rápido y agradable el camino hasta el orgasmo.

Además, resulta súper excitante para el hombre, pues durante toda la penetración, podrá estar contemplando el cuerpo de su pareja y guiar él el ritmo de los movimientos.

El ángulo perfecto

Para poder disfrutar al máximo con esta posición, lo más importante es conseguir que el cuerpo de la mujer acabe formando un ángulo de 45º, así el placer será inigualable, pero vamos por pasos.

Para empezar, tienes que buscar una superficie que sea plana, resistente y que sea lo suficientemente alta, como puede ser una mesa, una cómoda o una barra de la cocina. Como ves, es ideal también para avivar la pasión de la pareja y disfrutar de relaciones íntimas en lugares diferentes a los usuales.

La mujer debe tumbarse sobre la superficie de manera que su trasero quede colocado al borde de este. El hombre se situará enfrente de su pareja, mientras ella abre sus piernas y las eleva colocándolas sobre los hombros de él. Cuando la mujer se encuentre cómoda, tan solo tendrá que apoyar sus brazos sobre la superficie y levantar su cadera. Será entonces cuando el hombre la agarrará por el trasero para acercarla hacia su cuerpo y poder iniciar la penetración.

Disfrutarás de una deliciosa penetración en el aire que el hombre podrá ir guiando con sus brazos. Y uno de los mejores trucos para aumentar las sensaciones es que él apriete con más o menos intensidad los glúteos de ella, algo que sin duda será perfecto para experimentar un gran placer en el momento del orgasmo.

Permite la estimulación del punto G femenino y el clítoris

¿Por qué la postura de La mariposa es una de las más placenteras que el Kamasutra recoge para la mujer? Pues porque permite una estimulación extrema tanto del clítoris como del punto G femenino durante la penetración.

Se consigue una penetración profunda que llega a estimular estas dos zonas erógenas del cuerpo femenino, debido a que la pelvis de la mujer está perfectamente elevada para ello. Este placer puede incrementarse muchísimo si durante algún momento el hombre presiona el clítoris de su pareja con su dedo pulgar, por ejemplo.

Además, como la espalda de la mujer está perfectamente apoyada, el hombre también puede utilizar una de sus manos para agarrar y acariciar otras zonas erógenas que queden a su alcance como la parte interna de los muslos o los senos.

Últimos Videos
comments powered by Disqus