Posiciones claves para llegar al orgasmo

Practica una intensa estimulación clitoriana
  • lunes 04 de septiembre de 2017 - 12:00 AM

RELACIONES

¿Quieres descubrir qué posiciones favorecen el orgasmo femenino? Entonces, sigue leyendo, porque en este artículo vamos a desvelarlas. Sigue leyendo para descubrir en las siguientes líneas cuáles son las mejores posiciones para que la mujer llegue más rápido al orgasmo y sienta más placer.

La tuerca enroscada

Para hacerla, la mujer debe acostarse boca arriba sobre la cama con las piernas completamente estiradas hacia arribas y cruzando una por encima de la otra. Entonces, el hombre debe sujetar las piernas de la mujer por la parte de los tobillos para ayudarle a mantenerlas bien estiradas todo el rato. Una vez en esta postura, dará inicio a la penetración. También es una postura súper placentera para el hombre, por lo que puede ser ideal para gozar de un increíble orgasmo sincronizado.

La mariposa

- Ella debe tumbarse boca arriba sobre una superficie plana y elevada, ya sea una mesa, la barra de la cocina, una cómoda, etc. Su trasero tiene que quedar justo situado en el borde de la superficie.

- El hombre debe acercarse a la mujer para que la mujer coloque sus piernas sobre los hombros de él.

- Una vez en esta postura, la mujer tendrá que apoyar sus brazos sobre la superficie y elevar su cadera.

- El hombre cogerá a la mujer por el trasero y la atraerá hacia él para dar inicio a la penetración.

El trono del rey

También llamada ‘La silla del amor', para llevarla a cabo el hombre debe sentarse en el borde de la cama, por ejemplo, y apoyar los pies en el suelo. La mujer deberá sentarse sobre él, pero dándole la espalda. Luego, ella tendrá que inclinar un poco el cuerpo hacia un lado para iniciar la penetración y realizar los movimientos que desee.

El tornillo

La mujer tiene que acostarse boca arriba quedando al borde de la cama y llevar sus piernas hacia un lado, de manera que el hombre se mantenga arrodillado frente a ella e inicie la penetración. Además, él tiene las manos completamente libres para acariciar otras zonas erógenas femeninas, como los senos.