Descubre cómo hacer un griego

El uso del preservativo es de vital importancia
  • jueves 23 de marzo de 2017 - 12:00 AM

ESTILO

Seguro que más de una vez has oído hablar de que alguien ‘ha hecho un griego', pero ¿qué significa esto exactamente? Un griego es el nombre que se le da al sexo anal y, de hecho, no es la única práctica sexual que se denomina con un gentilicio pues, en el sexo, también tenemos otras disciplinas como, por ejemplo, un francés.

¿Por qué aparecieron estos eufemismos? Básicamente porque las relaciones sexuales han sido un gran tabú en las épocas precedentes y, para evitar llamarlas con su propio nombre, se rebautizaron con otras formas más sutiles y sofisticadas. En este artículo vamos a descubrirte qué es un griego y cómo hacerlo para que puedas disfrutar plenamente de tus relaciones sexuales.

Consejos para disfrutar de un griego

El griego o sexo anal es un tipo de relación sexual que puede llegar a ser muy placentera, eso sí, si la practicas de un modo determinado y con mucho, muchísimo, cuidado.

Tenemos que tener en cuenta que en el ano no existen fluidos que faciliten la penetración ni la fricción, además, su capacidad de dilatación es limitada y mucho más gradual que la de la vagina.

Por tanto, si quieres disfrutar de un griego y que tanto tú como tu pareja lo paséis en grande, tienes que seguir estos pasos:

1- Máxima excitación: es importante que los dos estén excitados para practicar un griego pues, como ya hemos dicho, la estimulación anal no produce demasiado placer a no ser que tú ya estés excitado de manera previa. Por tanto, dense tiempo para alargar los preliminares y tener auténticas ganas de sexo.

2- La importancia de la lubricación: es esencial que si quieres hacer sexo anal, cuentes con un lubricante íntimo que ayudará a que la fricción con el pene sea placentera y no dolorosa. Tener relaciones anales sin lubricante puede ser doloroso y producir fisuras o heridas anales.

3- No te olvides del resto del cuerpo: solo penetrar por la cavidad anal y no tocar otras partes del cuerpo es un gran error porque en el ano apenas hay terminaciones nerviosas que produzcan placer, sobre todo a las mujeres. Por tanto, aunque estén teniendo relaciones de este tipo, sigue estimulando a tu pareja tocándole los genitales o masturbándola.

4- Empieza de forma lenta: cuando llegue el momento de la penetración, te recomendamos que la entrada del pene sea lenta y con sumo cuidado. Una vez ya dilatada la cavidad, será más fácil poder hacer movimientos más rápidos pero, siempre, con cuidado y sin forzar demasiado.

No te pierdas nuestras mejores historias