- jueves 27 de junio de 2024 - 1:00 AM
Los métodos de barrera, como el condón, solo te protegen contra las enfermedades de transmisión sexual (ETS) si en realidad las usas. Por eso, tener protección a la mano siempre, hace que sea más fácil seguir tu plan de tener sexo seguro (sexo más seguro). Por suerte, los condones son pequeños, súper fáciles de llevar a todas partes y puedes guardarlos en tu bolso o mochila (lejos de cualquier objeto que pueda pincharlos, ¡por supuesto!) También es buena idea tener suficientes condones y lubricante cerca de tu cama. También puedes hacer que el sexo más seguro sea más práctico si añades el condón de manera natural a los juegos y caricias antes del sexo vaginal o anal. Puedes ponerle el condón a tu pareja sexual y frotarle lubricante en el pene mientras se siguen tocando y besando. Así, el condón se vuelve parte de la acción, en vez de interrumpirla. Si usas un condón interno (también conocido como condón femenino), puedes ponértelo antes de tener relaciones para que al momento de tener sexo más seguro, este sea algo más espontáneo. Nada arruina un momento divertido y sensual como el estrés. El sexo seguro (sexo más seguro) es en realidad un mejor sexo, porque deja que te concentres en el placer y en tu pareja, sin preocuparte de las infecciones de transmisión sexual (ITS). Saber que te estás protegiendo y que proteges a tu pareja sexual de un embarazo o de las ITS puede hacerte sentir orgulloso y responsable. Hablar con tu pareja acerca de las ITS, la protección y hacerse exámenes juntos, sirve para fortalecer la relación, mejorar la comunicación y hacer que tengan más intimidad y confianza.