Ritual de fin de año para barrer lo malo y llamar la abundancia

Diciembre es el mes ideal para una limpieza profunda que vaya más allá del polvo y el desorden. Para cerrar ciclos y abrirle la puerta a la paz, debes combinar la limpieza física del hogar con una depuración energética que ayude a soltar cargas mentales, preocupaciones y malas vibras acumuladas durante el año.

El primer paso es sencillo: utiliza una escoba nueva y barre desde afuera hacia adentro, visualizando cómo dejas atrás todo lo negativo. Mientras limpias, enciende un sahumerio de salvia y otro de palo santo, permitiendo que el humo recorra cada espacio del hogar y se lleve la energía estancada.

La sal será tu gran aliada. Coloca pequeños recipientes con sal en las esquinas o prepara agua con sal para rociar puertas y ventanas, sellando así el hogar contra energías densas. Para reforzar el ritual, acompaña el proceso con sonidos, como campanas o palmadas, que ayuden a mover y renovar la vibración del ambiente. Este ritual cobra fuerza si se realiza los últimos días del año.